Sarah Palin renuncia como gobernadora de Alaska
La republicana Sarah Palin abandonó el cargo de gobernadora de Alaska, comprometiéndose en un discurso de despedida a continuar luchando por el pueblo de ese estado pero sin dar pistas sobre si volverá a presentarse a un cargo público.
La derrotada candidata a vicepresidenta en las elecciones de 2008 transfirió el poder al nuevo gobernador Sean Parnell durante una ceremonia en Fairbanks, dejando el puesto con su futuro político ensombrecido por investigaciones sobre ética, juicios pendientes, y una popularidad en declive.
El 3 de julio Palin anunció por sorpresa que abandonaría el cargo 18 meses antes de lo estipulado, lo que generó especulaciones acerca de sus próximos pasos y sobre si competirá en las elecciones presidenciales de 2012.
"Algunos aún eligen no escuchar por qué tomé la decisión de marcar un nuevo curso para hacer avanzar el estado", dijo Palin en un discurso similar al de una campaña política, en el que habló de sus logros mientras estuvo en el puesto. "Con esta decisión, ahora seré capaz de pelear aún más duro por ustedes, (por) lo que está bien y es correcto (...) y nunca he sentido que necesitas un título para hacer eso", manifestó Palin.
La gobernadora saliente había citado una variedad de razones para renunciar: el peso de luchar contra casi dos decenas de cargos relativos a asuntos éticos, que ella ha calificado como "frívolos", o su deseo de evitar ser vista como una gobernadora impotente al acercarse el final de su período.
Palin entró de lleno a la escena nacional el año pasado cuando el candidato presidencial republicano John McCain la eligió como su compañera de fórmula en la campaña que finalmente consagró al demócrata Barack Obama como presidente de Estados Unidos.
Palin, quien a menudo se ha quejado de que su familia ha sido tratada de manera injusta por la prensa, también disparó contra los periodistas en su discurso de despedida. Las investigaciones sobre temas éticos han ayudado a deslucir su imagen y sus cifras de aprobación. Una nueva encuesta de Washington Post-ABC le asigna una aprobación de un 40%, con un 53% de los consultados manifestando una visión desfavorable de ella.
No obstante, Palin sigue siendo fuertemente popular entre los republicanos que comparten sus posiciones políticas conservadoras. Al advertir a los ciudadanos de Alaska que se opongan a lo que ella calificó como mensajes "anti-cacería" ofrecidos por las celebridades de Hollywood, Palin ofreció un mensaje propio. "Los patriotas protegerán nuestro derecho consagrado por la Segunda Enmienda a portar armas", expresó la republicana. "Hollywood necesita saberlo: comemos, por lo tanto cazamos", agregó.