Bárcenas espera ahora la decisión del Supremo para despejar su futuro
El tesorero del PP declara durante dos horas y media ante el juez.
El tesorero del PP cumplió ayer lo que, según confesión propia, era su máxima aspiración: declarar ante el Tribunal Supremo para demostrar su inocencia. Durante dos horas y media, Luis Bárcenas fue interrogado por el magistrado Francisco Monterde y el fiscal Juan Ignacio Campos. A la salida, comentó a los periodistas: "Estoy muy contento por haber podido declarar y por aportar las pruebas que demuestran mi inocencia, muchas gracias".
A partir de ahora, el Supremo decidirá si archiva las diligencias que se han instruido por un presunto delito de cohecho contra el tesorero del PP o, por el contrario solicita el suplicatorio al Senado para imputarle. De esta decisión depende el futuro de Bárcenas, ya que éste ha declarado que en el caso de que le sea pedido el suplicatorio dejará "de forma transitoria" su cargo.
En la dirección del PP se confía en que el Supremo despeje todas las dudas antes de que comience el mes de agosto pues, de lo contrario, esta decisión podría retrasarse a septiembre y continuar el calvario judicial que castiga al partido.
Declaración de Merino
Hoy declarará también en el Supremo el diputado nacional del PP Jesús Merino, al que se acusa de un presunto delito fiscal y de su vinculación a la trama que dirigía Francisco Correa. Al contrario que Bárcenas, Merino puso su cargo en la dirección del Grupo Parlamentario y su acta parlamentaria a disposición de Mariano Rajoy en cuanto su nombre apareció en el sumario judicial.
Merino solicitó retrasar su declaración por tener previsto para estas fechas un viaje a Miami, pero el Supremo denegó su petición.
Una reforma de la Ley de Enjuiciamiento Criminal en 2002, en tiempo de la mayoría absoluta del PP, abrió la puerta a que los parlamentarios que están siendo investigados por el Tribunal Supremo puedan participar en las diligencias sin necesidad de tramitar un suplicatorio ante la Cámara correspondiente.