La Seda presenta un ERE temporal para más de la mitad de la plantilla en Barcelona
La Seda de Barcelona presenta a la Administración un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) temporal que afectará a 139 trabajadores de la fábrica de El Prat de Llobregat, casi un 60% de la plantilla, formada por 234 trabajadores.
La suspensión presentada es de 120 días (cuatro meses) en los próximos ocho meses, una medida que es enmarca dentro del plan de viabilidad que ultima la química y que prevé reducción de costes y venta de activos no estratégicos, además de una propuesta de ampliación de capital de 150 millones de euros.
La compañía comunica oficialmente la medida temporal en una reunión con el comité de empresa de El Prat. La dirección argumentó que es una medida "preventiva" ante una situación "difícil" por la que pasa la compañía, según explicaron fuentes cercanas al comité.
En declaraciones a Europa Press, las mismas fuentes subrayaron que La Seda afronta unos meses cruciales, en los que "muchas cosas tienen que salir bien", ya que están en marcha conversaciones con entidades financieras, instituciones y accionistas sobre su futuro industrial.
No obstante, lamentaron que el ERE temporal llegue en un momento en el que la factoría catalana "empezaba a funcionar", tras haber permanecido ocho semanas parada y rechazaron los argumentos -económicos, de producción y organizativos- que alega la empresa.
Sobre la planta gaditana de San Roque, señalaron que La Seda reitera su intención de mantener la suspensión temporal en el centro hasta octubre, tal y como anunció. "Una vez pase este periodo, ya veremos qué pasa", apuntaron los sindicatos.
Además, anunciaron una nueva oleada de movilizaciones a partir de la próxima semana en contra del expediente y para reiterar a la Generalitat su exigencia de que agilice la concesión del crédito de 15 millones del ICF a la empresa, una suma que es fundamental para mantener los puestos de trabajo en la compañía.
Con pérdidas de 565 millones en 2008, la Seda prepara un plan para salir de la difícil situación financiera en la que se halla inmersa. La dirección contempla de venta de algunas factorías que posee en Europa, aunque oficialmente ha descartado confirmar cuáles se verían afectadas.
De momento, la dirección ya decidió como primera medida de contención trasladar a su fábrica barcelonesa toda la división corporativa y de administración que poseía en el Paseo de Gracia de la capital catalana desde 1998.