La caída de la confianza del consumidor culmina otra semana de pérdidas en Wall Street
Otra semana de corrección en la Bolsa de Nueva York. Y van tres. La fuerte caída experimentada por la confianza del consumidor ha puesta la guinda a una semana impregnada de incertidumbre. Las cuentas de Alcoa y la mejora de las optimistas previsiones del FMI sobre la economía mundial no lograron insuflar el suficiente optimismo en Wall Street que perdió un 1,62% semanal.
Sin confianza, las dudas se avivan. Esta vieja máxima volvió a hacerse realidad hoy, cuando la Universidad de Michigan publicó un resultado de la confianza del consumidor mucho peor de lo esperado. A ello se sumó el sabor agridulce que ha dejado en Wall Street el inicio de la temporada de resultados. En el balance semanal, el Dow Jones se dejó un 1,62%, mientras que el tecnológico Násdaq y el selectivo S&P500 se apuntaron sendos retrocesos del 2,25% y 1,93%.
Los nubarrones persisten así en el parqué neoyorquino, que pese a intentar las ganancias tras las cuentas de Alcoa, no logra despertarse de su letargo. El broche a esta mala semana lo puso el dato de la confianza del consumidor, que se ha desplomado en su primera lectura de julio hasta los 64,6 puntos, desde los 70,8 puntos de finales de junio. La noticia ha caído como un jarro de agua fría en el parqué y los inversores se entregaron a las ventas transcurrida apenas media hora de la negociación.
Esta fuerte caída se produce una semana después de que los datos de desempleo de junio reflejaran que la destrucción de empleo, lejos de contraerse, sigue en aumento. Los consumidores observan con preocupación el aumento imparable de la tasa de paro, que ya se aproxima al 10%.
Por otro lado, y sin salir del apartado macro, el mercado conoció que el déficit comercial de EE UU se redujo inesperadamente un 9,8% en mayo hasta situarse en los 25.960 millones de dólares. Este dato arroja la esperanza de que el PIB del segundo trimestre registre una menor caída gracias a estos datos de la balanza comercial.
En el plano corporativo, las petroleras continuaron su corrección a la baja, después de que Chevron afirmara que la debilidad del dólar iba a perjudicar sus cuentas. Las acciones de la energética retrocedieron esta semana un 4,69%.
Los inversores esperan ahora que los resultados empresariales que a partir de la semana próxima presentarán las principales compañías estadounidenses ayuden a despejar esas dudas.
Por su parte, GM volvió hoy a cotizar en Bolsa después de su bancarrota. La renacida compañía automovilística augura un "nuevo comienzo" para la firma histórica, que se revalorizó un 37,40% al cierre de la sesión.
Bank of America, farolillo rojo de la semana
El peor resultado semanal de los 30 valores que cotizan en el Dow Jones se lo llevó Bank of America, que vio como sus títulos retrocedieron un 6,01%. Junto a ésta, también registraron fuertes pérdidas el conglomerado General Electric (-5,93%), el fabricante de alumnio Alcoa (-5,27%) y las tecnológicas Microsoft (-4,19%) e Intel (-4,07%).
En el lado de las ganancias, el mayor avance se lo apuntó American Express, con una subida del 4,27%.
El petróleo de Texas cerró hoy por primera vez en siete semanas a menos de 60 dólares por barril, afectado por la debilidad de la demanda, tras bajar un 1,3% y terminar a 59,62 dólares.