Corbacho amplía hasta el otoño la posibilidad de un acuerdo en el diálogo social
El ministro de Trabajo e Inmigración, Celestino Corbacho, ha ampliado hasta el otoño la perspectiva de negociación de la mesa del diálogo social, y afirmó que el Gobierno "no contempla la hipótesis" de legislar sin un acuerdo previo entre patronal y sindicatos.
"Creo que el verano hay que entenderlo hasta el 21 de septiembre, hasta que empieza el otoño", dijo a Efe en un Consejo informal de ministros de Trabajo de la Unión Europea.
Sobre la posibilidad de que el Ejecutivo legisle en el caso de que patronal y sindicatos no lleguen a un acuerdo antes de vacaciones, el titular de Trabajo reiteró que "es una hipótesis que el Gobierno no contempla" aunque matizó que el Ejecutivo "tiene detrás once millones de votos".
"Se puede gobernar de dos maneras: tienes más de once millones de votos, en consecuencia no tomas en consideración nada más, y otra forma, que es la que inspira al Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero, que es que las medidas deben tomarse de la forma más consensuada posible", aseguró.
Afirmó que tanto los sindicatos como la patronal acuden con un espíritu más flexible a la reunión de mañana de la mesa de diálogo social, pero a su entender "no se puede decir que si se aprueba un acuerdo en 72 horas es un éxito y si no es un fracaso".
Aunque rechazó de este modo una excesiva presión temporal, el ministro insistió en que debe trabajarse con el objetivo "de conseguir un acuerdo lo antes posible" y "a poder ser antes de vacaciones, porque la crisis no entiende de fechas".
"¿Por qué es necesario anticipar el acuerdo?, se preguntó Corbacho, "por una razón obvia: debemos abordar medidas, discutirlas e implementarlas. Y por tanto no debemos perder excesivamente el tiempo", agregó.
"Más complejo" que hace cuatro años
Corbacho reconoció que a consecuencia de la crisis económica el diálogo social es ahora "más complejo" que hace cuatro años, ya que entraña también una discusión socioeconómica sobre temas fiscales y financieros, y sobre cómo afectan los nuevos modelos productivos a los mercados de trabajo.
Así, consideró "razonable" que en esta mayor complejidad aparezcan posturas contrapuestas, pero que deben "llegar a un punto de equilibrio", un objetivo en el que aseguró que está trabajando el Gobierno.
"Pero dicho esto, tanto sindicatos como CEOE han manifestado su voluntad de llegar a un consenso y un acuerdo, y por tanto el Gobierno lo que está haciendo estos días es ayudar en la medida de lo posible, respetando la autonomía de las partes, a que ese acuerdo sea posible a poder ser antes de vacaciones"
Por último, insistió en que los recientes "altibajos" del diálogo social no han impedido al gobierno "adoptar más de cien medidas" contra la crisis.
El diálogo social vive mañana un día crucial
El diálogo social vivirá mañana una jornada crucial para su futuro tras el evidente alejamiento de patronal y sindicatos a lo largo de los últimos días.Por la mañana, el director de la Oficina Económica de Moncloa, Javier Vallés, se reunirá con los secretarios generales de CC OO y UGT, Ignacio Fernández Toxo y Cándido Méndez, así como con los secretarios de Acción Sindical de ambos sindicatos, Ramón Górriz y Toni Ferrer, los dos hombres que están llevando la negociación sindical en el diálogo social.Se trata de un encuentro bipartito, como el que el Gobierno ya ha celebrado con la CEOE (el pasado viernes celebraron un encuentro), y que precede a la reunión, esta vez a tres bandas, que el Ejecutivo mantendrá mañana por la tarde con los agentes sociales.