Los técnicos dejan paso a los políticos en el diálogo social
La llave del pacto social ha cambiado de manos. Ante el peligro que corre el acuerdo desde que la pasada semana la CEOE retomara su programa de máximos, Gobierno, patronal y sindicatos han dejado a un lado a sus negociadores habituales -los expertos técnicos de cada área- para sacar sus capitanes al campo. Serán los dirigentes políticos de cada organización, y el propio presidente Zapatero quienes luchen ahora por cerrar un acuerdo tripartito antes de agosto. Un ansiado pacto que, aunque en todo caso sería de mínimos, no ha logrado consensuarse en todo un año.
La agenda de encuentros bilaterales marcada por el Ejecutivo tendrá hoy como invitados al presidente de la CEOE, Gerardo Díaz Ferrán, y a Santiago Herrero, vicepresidente de la patronal. El Gobierno busca convencerles para que vuelvan a apartar de la negociación sus grandes reclamaciones: una reforma del mercado laboral que abarate el despido improcedente, y una rebaja de cinco puntos en las cotizaciones empresariales. Fuentes cercanas a la negociación aseguran que Zapatero en persona se ha implicado en esta labor, lo que ya hizo en mayo, cuando obtuvo el compromiso patronal de renunciar a su programa de máximos.
Por parte de los sindicatos, serán los secretarios generales de CC OO, Ignacio Fernández Toxo, y de UGT, Cándido Méndez, quienes acudan mañana a la cita con el Gobierno, con la expectativa de aumentar más allá de seis meses la nueva renta destinada a los parados que no reciben prestación alguna.
Dado que el diálogo social entró en punto muerto el pasado jueves, la actual ronda de encuentros entre los líderes supone quemar los últimos cartuchos que quedan en la búsqueda del consenso. De alcanzarse, el pacto debería comenzar a fraguarse la tarde del jueves, cuando está previsto que se retome la negociación tripartita.
Gobierno y CEOE excluyen a Cepyme
Pese a que Jesús Bárcenas, presidente de Cepyme, ya advirtió que la patronal de la pequeña y mediana empresa debía tener voz propia en la negociación del diálogo social, Gobierno y CEOE -organización a la que pertenece- han vuelto a dejarla fuera de los encuentros programados. Bárcenas, quien ha admitido públicamente mantener diferencias con el presidente de la CEOE, Gerardo Díaz Ferrán, se quejó la primera vez a Moncloa, donde le aseguraron que sería convocado para futuras reuniones, pero que consideraban lógico que fuera la propia patronal quien les citara.