Ordóñez pide a Caja Duero y Caja España que hagan una fusión plena
El Banco de España ha pedido a Caja Duero y Caja España que avancen hacia una fusión plena, en lugar de optar por una integración parcial. Ambas entidades han encargado a la firma KPMG que diseñe el mejor modelo de combinación. Las peticiones del supervisor de más información sobre el protocolo de fusión van a provocar que este no se presente hasta después del verano.
El Banco de España ha trasladado a la cúpula directiva de Caja Duero y Caja España -dos entidades han entablado conversaciones formales para su combinación- que vería con buenos ojos la opción de una fusión plena, frente a la posibilidad de que se decanten por una integración parcial, según fuentes conocedoras de las conversaciones.
Los consejos de administración de ambas entidades encargaron a la consultora KPMG, a finales de mayo, que analizara las alternativas "más eficientes de combinación". Teóricamente, una de las fórmulas que están abiertas es el Sistema Institucional de Protección (SIP), un mecanismos de respaldo mutuo que permitiría a las dos cajas quedarse en un estadio previo a la plena fusión.
Aunque esta opción conllevaría menos trabas legislativas, el Banco de España prefiere que las cajas castellanoleonesas avancen hacia una completa integración, aunque dejará libertad a las entidades para que decidan su futuro.
Fuentes oficiales de las cajas han declinado comentar la información, y han remitido al comunicado hecho público por ambas el 20 de mayo, donde expresan su deseo llegar a combinar "sus estructuras, negocios y actividades".
Aunque en un principio se habían marcado el comienzo de las vacaciones estivales como fecha tope para presentar el protocolo de unión al Banco de España, todo apunta a que no ocurrirá al menos hasta septiembre. La explicación es que el organismo dirigido por Miguel Ángel Fernández Ordóñez habría pedido mayor concreción sobre algunos aspectos de la combinación de Caja Duero y Caja España.
Otro de los motivos que ha retrasado las conversaciones es la intención de incorporar al proyecto a otras cajas de Castilla y León. Los directores generales de las dos entidades, Lucas Hernández y José Ignacio Lagartos, han recordado en varias ocasiones que el proceso está abierto al resto de cajas de la región.
Movimientos en Andalucía
En Andalucía, las conversaciones no han comenzado formalmente, aunque el primer movimiento tiene ya el visto bueno de la Junta de Andalucía y se espera que se produzca en el corto plazo. Se trata de la fusión de Cajasur y Unicaja, a las que podría unirse Caja Jaén, que ayer mismo daba cuerpo a esta teoría admitiendo su disposición a integrarse en las operaciones que puedan abordarse en la comunidad, según informa Rosa Coronilla.
Cajasol, por su parte, mantiene su interés por liderar una integración de ámbito interregional, preferentemente con las cajas extremeñas, una opción que contaría también con el beneplácito del Gobierno de José Antonio Griñán. La renovación de consejo, recién culminada en Caja Badajoz y en marcha en Caja Extremadura, podría desbloquear este movimiento entre cajas de provincias limítrofes.
En el contexto andaluz, sólo Caja Granada se mantiene sin socios a la vista, aunque se muestra abierta a cualquier movimiento que pueda encabezar. Esta entidad, que ha aspirado históricamente a integrar a Caja Jaén en pugna abierta con Unicaja, se ofreció recientemente a quedarse con Cajasur al igual que hizo Cajasol antes de que la Junta se inclinara por la vía malagueña.
En Cataluña, Caixa Terrassa enfrió ayer una posible fusión con Caixa Sabadell y Caixa Manlleu. Los directores de estas tres entidades mantuvieron una reunión de casi dos horas con el subgobernador del Banco de España, Javier Arístegui. El responsable de Caixa Terrassa, Enric Mata, declaró a TV3 a la salida del encuentro que "no existe ningún proceso de fusión. No hay nada que firmar, simplemente estamos considerando las alternativas de cooperación y de colaboración". Mata realizó estas declaraciones al ser el único directivo que salió por la puerta principal del Banco de España, acompañado del recién nombrado presidente de Caixa Terrassa, Jaume Ribera. Fuentes de las otras dos cajas, Sabadell y Manlleu, coincidieron en que la reunión fue estrictamente técnica, para considerar varios escenarios de colaboración, desde la creación de centros operativos compartidos, plataformas tecnológicas comunas, sistemas integrados, emisiones conjuntas, hasta la posibilidad de iniciar fusiones.
Sin salir de la Comunidad Autónoma catalana, el hasta ayer presidente de Caixa Girona, Arcadi Calzada, se refirió a otra integración, con Caixa Catalunya y Tarragona. De forma más explícita, y a la misma cadena de televisión Calzada indicó que "no hay nada. Lo que sí existe es un interés en dar por hecha esta fusión y otras. Caixa Girona no tiene ninguna necesidad de ir hoy por hoy a las fusiones, que es posible que en un futuro se tengan que contemplar". Calzada también acusó a los bancos de alentar rumores sobre fusiones de cajas.
Diputados de PSOE y PP reclaman una revisión profunda de la ley de cajas
Imagen insólita en el Congreso de los Diputados. Dos parlamentarios del Partido Popular (Vicente Martínez Pujalte y Ana Torme) y otro del PSOE (el ex ministro Jordi Sevilla) reclamaron ayer, durante la presentación de un libro en el que han colaborado, una profunda revisión de la ley estatal de cajas de ahorros. "Cuando nosotros tuvimos responsabilidades políticas fuimos capaces de llegar a acuerdos importantes", recordó Pujalte. Las principales propuestas, recogidas en el libro Pasado, Presente y Futuro de las Cajas de Ahorros son las siguientes:Consejos específicos para la obra social. Pujalte y Sevilla proponen que se segreguen las funciones de obra social de las atribuciones habituales del consejo de administración de las cajas, y que las asuma un nuevo organismo donde pueda haber "una mayor presencia institucional, con regularizaciones autonómicas que señalen objetivos y fines".Fin de la tutela autonómica. Los dos diputados defienden "la eliminación de duplicidades supervisoras" de modo que sean el Banco de España y la CNMV los únicos organismos responsables, especialmente en caso de fusiones.Régimen de incompatibilidades. Ambos congresistas quieren que se evite "la presencia de cargos políticos en los consejos de administración" y que se defina un marco de mandatos que garantice su independencia.Captación de capital. También proponen que se mejoren las fórmulas para que las cajas de ahorros tengan "capacidad para captar recursos propios", con cuotas participativas con derechos político.No a la caja única por comunidad autónoma. Tanto el político del PP como el del PSOE consideran que "se debe fomentar fusiones de cajas de ahorros de distintas comunidades autónomas para conseguir tamaños que permitan aprovechar mejor las economías de escala del negocio.Marco estatal para la regulación de la obra social. Pujalte y Sevilla quieren evitar que "la divergencia entre las 17 regulaciones autonómicas produzca la incapacidad de desarrollo de la obra social de las cajas" y defienden un marco normativo estatal.El ex presidente de la CNMV, Manuel Conthe, presente en el encuentro informativo, tomó la palabra para celebrar las "superrevolucionarias" propuestas para abordar el futuro de las cajas, pero lamentó que sean difíciles de llevar a la práctica por los intereses políticos y regionales.
Contra el 'Oligopolio'
El presidente del Consejo Superior de Cámaras de Comercio, Javier Gómez-Navarro, advirtió ayer del peligro de un oligopolio financiero. "Una cosa es que haya demasiadas cajas, y otra cosa es que al final sólo queden tres o cuatro cajas", dijo Gómez-Navarro.