Cómo evitar el robo de contraseñas
Uno de cada diez niños sufre el hurto de su clave de 'messenger'.
Según un estudio realizado por la Federación de Empresas de Tecnologías de la Información de Castilla y León entre 2.000 alumnos de sexto de primaria (11-12 años), el 10,8% de los menores entrevistados manifestaron que les han robado su clave de acceso al messenger o al correo electrónico. A este porcentaje habría que añadir el de aquellos que no son conscientes de que su contraseña ha sido sustraída por otra persona.
Estos robos se pueden realizar de una manera bastante sencilla y suele usarse para ello algún tipo de software malicioso, como virus, spyware, troyanos o gusanos.
Cuando a una persona le roban su clave de acceso (lo cual es algo ilegal de por sí) su información privada puede ser vista: conversaciones, relación de contactos, información sensible y además quien la usurpó puede usarla y hacerse pasar por ella, con lo que el abanico de problemas se amplía.
Según Jorge Flores, experto de PantallasAmigas, una iniciativa para la promoción del uso seguro y saludable de internet y las nuevas tecnologías online por parte de los menores, "se trata de una cuestión de máxima importancia, puesto que es una estrategia muy común utilizada en los casos de ciberacoso, sexual o no. El acosador accede a datos privados del messenger y cuenta con la lista completa de contactos de la víctima con lo que puede iniciar un chantaje que derive en graves daños".
Para evitar problemas, PantallasAmigas recomienda, en primer lugar, no acceder nunca al chantaje.
Además, proteger la seguridad del equipo, porque actualmente el intruso puede permanecer oculto y resulta imposible combatir a un enemigo invisible. Segundo, proteger las claves, no compartiéndolas y cambiándolas de forma periódica. Y, por último, no almacenar información o imágenes demasiado comprometidas en determinados servicios online creyendo que las opciones de privacidad restringen el acceso.