La crisis hace revivir al paquete turístico
Turistas y mayoristas rescatan el viaje combinado para eludir riesgos ante quiebras y ajustar gastos.
Marcel Forns, director general de la asociación de agencias de viajes de negocios Gebta, asegura que la depresión económica global, al trasladarse a las capas medias de la sociedad de los principales países emisores de turistas, se ha transformado en una crisis de consumo.
Sin embargo, las familias, a pesar de las dificultades, no quieren renunciar a sus vacaciones. Por eso están buscando una alternativa de descanso que les permita acceder a productos asequibles y, sobre todo, con un precio controlado.
En este marco, "las familias vuelven a optar por la compra de los tradicionales paquetes turísticos como fórmula de viaje que les garantiza un mayor control del gasto", añade Forns.
Pero existe otra razón de peso que explica el resurgimiento del paquete turístico. Y es la mayor garantía y seguridad que ofrece el viaje combinado frente al individual. La quiebra de varias compañías el pasado verano como XL y sus filiales (Travel City Direct, Medlife Hotels y Freedom Flights) dejó en tierra a decenas de turistas y puso en alerta a los consumidores a la hora de contratar viajes.
"La mayoría de los que se quedaron en tierra no contrataron paquete turístico mientras que los que sí lo hicieron tuvieron mayor facilidad para regresar a sus hogares cuando se suspendió su vuelo", explica Rafael Gallego, presidente de la Federación Española de Agencias de Viajes (Feaav).
A juicio de Gallego, los mayoristas cubren con seguros al consumidor para evitar cualquier incidencia en todo el tramo del viaje (vuelo y estancia).
La explosión del mundo de internet en la contratación de servicios de viaje a finales de la década de los 90, combinado con años de bonanza económica, certificó la práctica desaparición de la fórmula tradicional del paquete turístico.
Desde Gebta señalan que el resurgir de este tipo de viaje cerrado es ya una realidad contrastada en los principales países emisores del centro de Europa y que "está por ver si se instala también en España, que a menudo tiende a moverse de modo distinto al del resto de los mercados europeos de referencia", dice Forns.
Gallego señala que las reservas para el verano están a un 10% por debajo de las del año pasado por estas fechas. Y eso que las rebajas en viajes han llegado hasta el 30%, en algunos casos para activar la venta anticipada. "Las compras se realizarán en el último momento, por lo que no sabremos en qué niveles nos estamos moviendo de actividad", señalan en la Feaav.
Uno de los productos vacacionales que está funcionando muy bien este año es el de los cruceros. La gente ha comprobado que viajar en barco visitando varios puntos de interés turístico es una forma más de controlar el gasto. "Realmente el crucero es una modalidad de un viaje combinado", insiste Gallego. En 2008, las ventas de estos viajes por barco se elevaron un 24%. "Pensamos que para este año la subida será del 20%".
Por su parte, las patronales de agencias de viajes europeas han lanzado una propuesta a la Comisión Europea sobre los derechos de los consumidores en los contratos de viajes combinados. Opinan que este tipo de adquisición de paquete turístico "debe estar regulado en un marco legislativo diferenciado del resto de normativas, a fin de contribuir a una mayor confianza entre empresas y consumidores".
Uno de los productos de viaje combinado con más éxito es el crucero. El pasado año, las ventas avanzaron un 24%
Ahorro en viajes de empresa
Gebta advierte que las empresas radicadas en España han aprovechado la situación de crisis para incorporar a sus necesidades de gestión de viajes nuevas herramientas tecnológicas a las que, durante los tiempos de bonanza, eran reticentes.Esta inclinación por incorporar sistemas de software avanzado a la gestión de los gastos de viaje corporativos se justifica porque una vez implementados pueden generar ahorros de entre el 30% y el 40% en los balances.Además, dan mayor peso en el control de compras de los departamentos financieros.Todos estos factores traerán como consecuencia un menor gasto en viajes que antes, pese a que pueda darse un proceso de recuperación económica.Una vez aplicadas e implementadas en las empresas las políticas de viajes y los motores de autorreserva, éstos pasarán a formar parte de la cultura y del hábito de compra de las organizaciones, con lo cual no van a desmantelarse, por mucho que mejore la coyuntura, añaden en Gebta."El nivel de aplicación de las políticas de viaje y del mayor grado de uso de las herramientas y tecnología de gestión en las corporaciones serán claves para este ahorro", señalan en las agencias.En época de crisis, el cliente de empresa además de gastar menos que antes viaja menos en business y está menos días fuera. Sin embargo, este turista sigue viajando, pese a todo. En este sentido, todos los agentes del sector (aerolíneas, hoteleras y portales) incluyen entre sus actividades productos y servicios de cara a ganar a este cliente.
Las cifras
10% han caído las reservas para el verano con respecto a las del año pasado por estas fechas.30% es el descuento que se está aplicando en algunas compañías del sector del viaje para activar la venta de viajes anticipada y no esperar hasta el último minuto.