Nortel acelera la venta de activos para salir de la bancarrota
Nortel parece estar en liquidación. La histórica compañía canadiense de equipos de telecomunicaciones, actualmente inmersa en una situación de suspensión de pagos, ha confirmado que va a vender algunos de sus principales activos. Así, Nortel señaló este fin de semana que planea vender sus negocios de telefonía móvil CDMA y de cuarta generación LTE a Nokia Siemens Networks por un importe cercano a 650 millones de dólares (unos 468 millones de euros). Un movimiento que, de cerrarse, implicaría el paso de cerca de 2.500 empleados del grupo canadiense a la compañía europea. Estas actividades generan unos ingresos anuales de 1.500 millones de dólares.
El consejero delegado, Mike Zafirovski, indicó que el negocio en el segmento de CDMA es el segundo más fuerte del mercado por detrás de Alcatel-Lucent, y cuenta con clientes como Verizon Wireless y Sprint Nextel. Ayer, el máximo directivo de Nokia Siemens Networks, Simon Beresford-Wylie, señaló que esperan cerrar el acuerdo de compra en el tercer trimestre del año.
Zafirovski explicó también que Nortel está en negociaciones avanzadas para la venta de otras filiales. Entre ellas podrían figurar las actividades en GSM, las operaciones en redes de Ethernet, la filial de infraestructuras empresariales o la sociedad participada junto con la surcoreana LG.
"Nortel asegurará sus activos más fuertes (tecnología, relaciones con los clientes y empleados) para jugar un importante papel en el futuro de las telecomunicaciones", aseguró Zafirovski, y añadió que el valor del negocio de Nortel en el segmento móvil es reconocido por toda la industria.
Lo cierto es que cuando termine este proceso, es posible que la nueva Nortel que salga de la bancarrota no se parezca nada a la antigua corporación, que dominó el sector a finales de la década pasada junto a firmas como Alcatel, Lucent, Motorola, Siemens y Nokia.
La compañía pide dejar de cotizar
Entre las decisiones de la dirección de Nortel está la petición formal a las autoridades bursátiles de Canadá para que las acciones comunes y las participaciones preferentes dejen de cotizar en el mercado de Toronto. La compañía señaló que no espera que estas acciones reciban valor alguno durante el actual proceso de protección de los acreedores.Lejos quedan ya los tiempos en los que Nortel era el mayor blue chip de las bolsas canadienses. En su momento más boyante, la empresa llegó a alcanzar una capitalización bursátil de 250.000 millones de dólares.