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Inmobiliario

Metrovacesa asegura que "no es posible" cumplir el pacto con Gecina

Metrovacesa afirmó ayer que "no es posible" completar la ejecución del acuerdo de separación suscrito en febrero de 2007 entre sus entonces máximos accionistas, Joaquín Rivero y Bautista Soler y Román Sanahuja, por lo que se mantendrá como accionista de Gecina.

En una comunicación remitida a la CNMV, la inmobiliaria indicó que, una vez analizadas el conjunto de las circunstancias y sin perjuicio de sus efectos, "no es posible completar la ejecución del acuerdo". El pacto de separación, que pretendía poner fin al conflicto entre las dos partes, contemplaba en su fase final el traspaso a Metrovacesa de una serie de inmuebles de oficinas propiedad de Gecina a cambio de su participación en la compañía francesa.

Metrovacesa se mantendrá como accionista de Gecina con una participación del 26,9% de su capital social y contará con los cinco administradores designados a propuesta suya.

Gecina rechazó recientemente ejecutar esta separación argumentando que el acuerdo se firmó con el anterior accionista de control de Metrovacesa (la familia Sanahuja), en tanto que actualmente la inmobiliaria está controlada por seis entidades financieras.

La segregación suponía que Gecina traspasara a Metrovacesa edificios de oficinas de París valorados en 1.700 millones de euros a cambio de su participación del 26,9%.

El pasado mes de abril, Gecina decidió abandonar el acuerdo pactado para separarse de Metrovacesa, su antigua matriz, al entender que su aplicación crearía una situación "insostenible" para la empresa francesa.

La decisión fue rechazada entonces por Metrovacesa, que se reservó "los derechos y acciones" que pudieran corresponderle.

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