Marc Puig no descarta dar entrada en la compañía a inversores ajenos a la familia
Aires de cambio en Puig. El grupo catalán propiedad de la familia del mismo nombre está dispuesto a incorporar a la compañía socios externos. "Es algo que no hemos hecho nunca, pero estaríamos dispuestos a hacerlo en función de las oportunidades que surjan", explicó ayer el presidente de la firma de perfumería y moda, Marc Puig, en una conferencia organizada por PricewaterhouseCoopers. "Dejo la puerta abierta", señaló el directivo, miembro de la tercera generación de la familia, que quiso puntualizar que "no hemos valorado nada".
El directivo defendió en Barcelona durante su intervención el nivel de profesionalización de la compañía. "El comité de nombramientos y retribuciones está formado por miembros ajenos a la familia y el consejo de administración incorpora dos miembros de la familia y seis consejeros independientes", defendió.
Las perspectivas que la firma de moda y perfumería maneja para 2009 están marcadas por la crisis. "Es un mal año. Seguiremos ganando cuota de mercado, aunque experimentaremos una caída de las ventas de un dígito, entre un 5% y un 10%". En lo que va de año, han experimentado un retroceso del 8%. "Estamos ante una categoría madura, estable, que sólo crece a niveles del IPC", apuntó.
El grupo catalán cree que en el actual contexto económico van a producirse concentraciones entre competidores, lo que va a permitir que aparezcan nuevas oportunidades de expansión o compras de marcas para Puig. El presidente de la compañía apuntó que uno de sus propósitos es situarse entre los cinco principales operadores mundiales del sector de la perfumería, en el que ocupa la séptima posición. Para ello aventuró un papel protagonista para Puig en adquisiciones. Coty, L'Oréal o Procter and Gamble son algunos de los principales competidores de Puig, que cuenta entre sus marcas con Carolina Herrera, Paco Rabanne o Nina Ricci.
El grupo catalán está presente en 130 países, 22 de ellos con filiales propias. En 2008, su facturación superó los 1.000 millones de euros.
Apolo, un nuevo plan a tres años vista
El espíritu inversor de Puig se plasma en Apolo, el plan que ha elaborado para los próximos tres ejercicios. Su objetivo es lograr una cuota de mercado mundial en el segmento de perfumería del 5%, frente al 3,5% actual. El primer ejecutivo de la compañía califica el segmento de la perfumería como de "lujo asequible" y anticíclico, con lo que no ha impulsado una bajada de precios pero sí "en algunas marcas hemos hecho tamaños más pequeños con precios de entrada más asequibles". La actual coyuntura hará, según Puig, que en 2011 "no facturemos mucho más que en 2008". En los últimos años, Puig ha desarrollado un plan de eficiencia que le supuso fusionar las estructuras comerciales y organizativas Myrurgia, Gal y Antonio Puig.