El Gobierno dará el viernes el primer paso para liberalizar los servicios
El jefe del Ejecutivo, José Luis Rodríguez Zapatero, ha anunciado hoy que su Gobierno dará el viernes el primer paso para la liberalización del sector servicios en España, ya que el Consejo de Ministros aprobará la llamada Ley âmnibus, que permite la aplicación en España de la directiva de la UE.
Zapatero ha pedido al líder del PP, Mariano Rajoy, que tenga "paciencia" para valorar los efectos del "ambicioso plan" del Gobierno para afrontar la crisis, entre cuyas medidas se encuentra la ley citada.
Lo ha hecho en el Congreso, en la respuesta a una pregunta del presidente de los populares sobre la necesidad de emprender reformas que estimulen la actividad económica y permitan superar la crisis.
Para el líder del principal partido de la oposición, "la única política" del Gobierno que "perciben los españoles es la del gasto", y ésta, a juicio de Rajoy, es "un suicidio a medio y a largo plazo".
Sin embargo, Zapatero ha señalado que el Ejecutivo ha afrontado la crisis mediante un "plan ambicioso" que "debe empezar a dar resultados", y, por ello, ha pedido "paciencia". Porque, además, hay reformas estructurales en marcha, ha afirmado el jefe del Gobierno, quien ha recordado algunas de las iniciadas durante la legislatura pasada en sectores como la energía, el transporte o la vivienda.
Ahora, ha continuado, la reforma inminente afectará al sector servicios, que representa casi el 70% del PIB, a través de la Ley âmnibus, cuyo proyecto aprobará el Consejo de Ministros el próximo viernes.
Modificación de 50 normas estatales
La llamada Ley âmnibus servirá para transponer la directiva europea de servicios, lo que requiere la modificación de casi 50 normas estatales. Se trata, en definitiva, de una reforma estructural cuyos objetivos son liberalizar un sector de gran peso en la economía española y crear aproximadamente 200.000 puestos de trabajo.
Zapatero la ha denominado como una "reforma modernizadora" que se suma a otras como las que afectan al mercado del alquiler de vivienda o a algunas más recientes, anunciadas en el último debate sobre el estado de la nación, como la nueva ley de economía sostenible o la de ciencia.
Rajoy no lo ve suficiente. A su juicio, la política económica del Gobierno se mide en "pronósticos que nunca se cumplen y en anuncios que no se concretan en nada", de tal forma que no genera confianza ni alienta el crecimiento de la economía. El modelo de Zapatero, para el presidente del PP, "lleva a España al desastre".
Reestructuración del modelo financiero
Por ello, ha pedido la puesta en marcha con urgencia de un sistema para la reestructuración del modelo financiero, algo que el Ejecutivo acomete con "lentitud", o la reforma energética, que ahora con la discusión sobre el cierre de la central de Garoña aboca al presidente del Gobierno a estar "contra su palabra o contra el sentido común".
Zapatero ha defendido las medidas fiscales de su Ejecutivo y la contención del gasto corriente.
Por otro lado, Zapatero se ha negado hoy a "entrar en el juego" de criticar la última campaña electoral, porque considera que hacerlo sólo generará desafección y desinterés en la actividad política, "que debe contar con el máximo respeto".
Asimismo, Zapatero ha reiterado hoy que la decisión del Gobierno sobre Garoña será "coherente" con su compromiso electoral, que pasa por la "sustitución gradual, ordenada y razonable" de la energía nuclear en favor de las renovables, siempre que se garantice el suministro.