Brasil descarta que los restos encontrados sean del avión de Air France
La Fuerza Aérea Brasileña (FAB) descartó que los restos recogidos el jueves en el área del océano Atlántico donde cayó el avión de Air France con 228 personas a bordo pertenecieran a la aeronave. El secretario de Estado francés de Transportes, Dominique Bussereau, pidió nuevamente "prudencia" sobre los trabajos llevados a cabo para averiguar las causas del accidente del A330 de Air France y admitió que es una "mala noticia" que los restos recuperados por la Marina brasileña no correspondan a la aeronave siniestrada.
Un helicóptero Lynx de la fragata Constituçao, guiado por un avión C-130 de la Fuerza Aérea Brasileña (FAB), había recogido un soporte usado para colocar cargas (pallet) y dos boyas, que podrían ser de un avión. Pero el brigadier Ramon Borges Cardoso, director del Departamento de Control del Espacio Aéreo de la FAB, dijo que después del análisis se había descartado que la pieza perteneciera al Airbus 300-200 siniestrado.
"Confirmamos que el 'pallet' encontrado no era parte de los destrozos de la aeronave", afirmó Borges Cardoso en una conferencia de prensa en la ciudad de Recife, en el noreste de Brasil, agregando que se trataría de "basura".
Hasta el momento, los aviones de la FAB han divisado desde el aire destrozos del Airbus y grandes manchas de combustible en una amplia región del Atlántico.
La fragata Constituçao había llegado el jueves por la mañana al área, para unirse a otros dos barcos de la Marina en las tareas de búsqueda, en las que participan también una decena de aviones de la FAB que tienen su base en Recife y en la isla atlántica Fernando de Noronha.
"Extrema prudencia"
Por su parte, "las autoridades francesas dicen desde hace varios días que hace falta tener una extrema prudencia", declaró el secretario de Estado francés en la emisora RTL, donde también recordó que los aviones y los buques franceses "no han visto nada".
"Son nuestros amigos brasileños los que habían visto cosas que creían que procedían de este avión", subrayó. Sin embargo, Bussereau no cuestionó la labor de los brasileños que son, dijo, "hermanos en el dolor" y aportan su ayuda a Francia.
En todo caso, reconoció que es "una mala noticia, evidentemente", porque "hubiéramos preferido que viniera del avión y tener información". Ahora, según el responsable galo de Transportes, habrá que continuar la búsqueda con el "objetivo principal" de encontrar las cajas negras, es decir las grabaciones de los datos.
Bussereau admitió que el tiempo "está en contra" porque la vida de los mensajes sonoros que puede emitir la caja negra es de 30 días. "Hace falta hacer todo lo posible para encontrarlos", insistió.