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Javier Salgado

"Las petroleras van a ganar peso en biocombustibles"

El responsable del bioetanol en Abengoa asegura que su actual cuota de mercado es la adecuada y que "la obsesión es perfeccionar la tecnología". Afirma que el sector va a vivir una época de concentración protagonizada por las compras de las petroleras

Javier Salgado (Madrid, 1966) entró "como becario en Abengoa hace 18 años" y ahora dirige la filial de Bioenergía de la compañía desde EE UU. La división aportó un 15,7% de los ingresos del grupo Abengoa en el primer trimestre, con 179,3 millones de facturación. Ya tiene tres plantas de fabricación de bioetanol en España, una en Lacq (Francia), otra en Rotterdam (Holanda) y cuatro en EE UU. Construye una más en Alemania, otra en Reino Unido y dos en EE UU.

Y nada más, de momento. En el marco del octavo congreso World Biofuels, organizado por la Fundación Focus- Abengoa en Sevilla la semana pasada, Salgado descarta que vayan a instalar más fábricas a medio plazo en ningún mercado. "Nos vamos a centrar muchísimo en invertir en tecnología. El objetivo es mejorar el ciclo de vida de las plantas con una reducción mayor de emisiones de CO2 competitiva en el mercado", tal y como se empieza a pedir en Europa y EE UU.

"Para Estados Unidos, es un paso abismal reconocer que las emisiones de CO2 son un problema de salud pública. Ahora toca plasmarlo. El mensaje que se está dejando entrever desde las Administraciones es que se promoverán los mejores etanoles, los que tengan una mayor calidad y una mayor reducción de emisiones", detalla Salgado. Hacia esa mayor calidad es a lo que se encamina Abengoa.

"El valor de la compañía estará en la diferenciación del producto"

¿Mejorará la situación del mercado para los biocombustibles con las nuevas directivas europeas y las buenas perspectivas en EE UU?

Estamos recibiendo mejores noticias que nunca, se empiezan a ver regulaciones a largo plazo, lo que es imprescindible para un negocio como éste. Estamos mejor que hace un año pero sigue siendo un mercado durísimo. ¡Estás hablando de quitar cuota de mercado al sector petrolero! En poco tiempo, veremos a las grandes petroleras entrar en el mercado comprando activos para ganar peso en biocombustible. La crisis traerá la consolidación de la industria. Nuestros competidores tendrán un carácter más industrial, sobre todo en EE UU y eso es bueno para la competencia.

¿Por qué descartan crecer en número de plantas en los próximos años?

Nosotros apostamos durísimo por crecer a la vez en Brasil, EE UU y Europa. Crecimos a tasas del 37% de media en los últimos seis años. El objetivo era tener presencia internacional en los tres mercados principales y ganar una masa crítica de producción que creíamos necesaria para tener un peso específico en el mercado. Ya no tenemos ninguna aspiración de tener muchos más litros.

¿Cuál va a ser entonces su estrategia a medio plazo?

No quiero decir que no nos importe crecer. Hemos estado obsesionados en crecer mucho y muy rápido. Quiero decir que veo el crecimiento de la compañía más orientado a ser diferenciador en el producto en lugar de tener más litros. Creo que el valor de la compañía está en esa diferenciación de producto, clave en un mercado de commodities . Ahí vamos a ser absolutamente implacables. Esa prioridad es más alta que crecer con nuevos activos o nuevas plantas.

¿No valoran entrar en los mercados asiáticos?

No son una prioridad, ya llegarán. Ahora mismo tienen un problema muy grande de materia prima porque compiten con la cadena alimentaria. Nosotros vamos a centrarnos en desarrollos tecnológicos que no compitan con la cadena. Estaremos allí pero ahora no es el momento.

Su meta es encontrar una tecnología que permita producir etanol con biomasa a nivel comercial.

Llevamos mucho tiempo trabajando en una tecnología de producción de bioetanol que no compita con la cadena alimentaria a escala piloto. Queremos desarrollar una tecnología propietaria que podamos comercializar. Vender la tecnología es un objetivo estratégico para la compañía, con un valor mucho mayor que todo el producto que podamos fabricar. Por eso el crecimiento de más litros es menos prioritario. Nos gustaría vender más galones de más calidad.

¿En qué punto del proceso están?

Nos toca dar ahora el salto grande a escala comercial. Esto es lo que vamos a hacer con el proyecto de Hugoton, en Kansas, para el que hemos firmado un contrato de 55 millones con el departamento de energía de EE UU. Produciremos 50 millones de litros de etanol a partir de biomasa. Vamos muy avanzados en cuanto a permisos e ingeniería. Lo razonable sería empezar a construir en 2010 y estar en marcha en 2012. La idea es refinar esta tecnología. Después, aplicarla a nuestros activos y venderla.

"El biodiésel y el bioetanol competirán en España"

"Va a haber cambios muy importantes en el mercado de los biocarburantes español propiciados por la aprobación de la orden ministerial", afirma Javier Salgado. La norma establece un objetivo mínimo anual de mezcla para biodiésel y bioetanol en diésel y gasolina, respectivamente, y un objetivo mayor común, para el que se le da a la petrolera la opción de cubrirlo con el porcentaje de biodiésel o bioetanol que más le convenga. "Creo que el biodiésel y el bioetanol van a terminar compitiendo por ese porcentaje extra de mezcla", estima Salgado, que valora que, "si la decisión se tomara exclusivamente en términos económicos, el etanol barrería al biodiésel".En la parte de etanol, el presidente de Abengoa Bioenergía estima que la orden ministerial española "fomentará un aumento muy importante de la demanda, que duplique o triplique los volúmenes actuales de consumo, y la consolidación de la mezcla directa, que ha sido la obsesión más grande que hemos tenido desde que construimos la planta de Babilafuente", afirma. El consumo de etanol ha estado limitado porque los productores lo mezclaban con ETBS, un subproducto de la fabricación de la gasolina, y no mezclaban directamente el etanol en la gasolina.

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