Opel, muy cerca del rescate tras el principio de acuerdo de GM y Magna
El concurso de acreedores sobrevoló el viernes sobre Opel y sus 53.000 empleados. A la hora del almuerzo, sin embargo, la esperanza se abrió para la compañía después de que GM y Magna cerrasen un principio de acuerdo que ahora estudia Berlín. Alemania tranquilizó el viernes a los Gobiernos de la UE y aseguró que tratará de salvar los empleos en todo el continente.
El fantasma de un concurso de acreedores pareció alejarse el viernes de Opel, al menos temporalmente después de que General Motors, el dueño de la compañía desde 1929, alcanzase un principio de acuerdo con el fabricante canadiense de componentes Magna para traspasarle la compañía. El Gobierno alemán confirmó ayer este acuerdo. Sin embargo, esto no significa que el futuro de Opel haya quedado cerrado. El pacto preliminar entre GM y Magna aún debe de ser aprobado por Berlín, lo que permitiría liberar los 1.500 millones en forma de préstamo puente que garantizarán la viabilidad de la compañía y de sus plantas, la de Figueruelas (Aragón) entre ellas.
Pese a las buenas noticias finales, el día no comenzó con excesivas esperanzas. El jueves habían quedado dañadas las negociaciones por la actitud de GM, que exigió 450 millones más de financiación extra para aceptar que sus activos europeos quedasen agrupados en una sociedad fiduciaria. Tanto fue así, que el viernes Fiat anunció que no acudiría a la reunión convocada por el Gobierno alemán tras asegurar que "la urgencia de la situación no puede forzarle a asumir riesgos inusuales", a la vez que mostraban su descontento por no haber sido informados "de ciertos datos e informaciones financieras clave". El consejero delegado de Fiat, Sergio Marchionne, aseguró que "la vida seguirá adelante" sin Opel y que se concentrará en su alianza con Chrysler. Poco después del anuncio de Fiat, la agencia Reuters informaba que el interés de Magna también se estaba enfriando por la actitud del Ejecutivo alemán.
Berlín, en todo caso, se esforzó el viernes por rebajar las expectativas. El ministro de Economía de Alemania, Karl-Theodor zu Guttenberg, aseguró a los periodistas reunidos frente a la Cancillería que no hay garantías de llegar a un acuerdo a corto plazo. "Hay algunas ideas de Magna que aún están siendo discutidas con GM y que nosotros también estamos revisando", dijo. La reunión comenzó el viernes a las 18.00 horas. La alternativa sigue siendo la misma: la suspensión de pagos.
Mientras, el modo de llevar las negociaciones por parte del Gobierno alemán ha levantado las suspicacias en todos los países en los que GM cuenta con plantas. La mitad de los 55.000 puestos de trabajo de Opel está en Alemania, pero hay varios países en los que la multinacional estadounidense es un fuerte empleador, sobre todo España (7.752 trabajadores), Reino Unido (4.700), Suecia (4.000), Polonia (4.000) o Bélgica (2.500). Estas sospechas de que Berlín trataría de salvar empleos en Alemania en detrimento de los de otros países (es año electoral en el país) llevaron a la Bruselas a convocar ayer una reunión de urgencia con los ministros de Industria. En ella, Alemania aseguró a los otros estados que los 1.500 millones con que financiará a Opel beneficiarán a todas las plantas. Eso sí, parece seguro que habrá recortes: Magna nunca han ocultado que vaya a hacer falta eliminar empleos.
Las cifras
53.000 son los empleados con que cuenta Opel en Europa. 7.500 de ellos trabajan en la planta de Figueruelas.
1.169 millones de euros perdió General Motors el pasado año en Europa.
1,5 son los millones de coches que vendió la multinacional en Europa en 2008.
Sebastián afirma que todo inversor apuesta por Figueruelas
El ministro de Industria, Miguel Sebastián, aseguró ayer en Bruselas, tras una reunión con sus homólogos para analizar el futuro de Opel, que el posible recorte de plantilla tras el rescate de la compañía "dependerá de los inversores. Pero hemos hablado con todos, y todos coinciden que Figueruelas es la mejor planta de la empresa". "Tenemos la joya de la corona", añadió Sebastián. Y aseguró que la productividad de Figueruelas es "entre un 30% y un 40% superior" al resto de plantas europeas de Opel.La diferencia, según el ministro, se explica "por los sacrificios que Figueruelas hizo en el pasado, y que probablemente los tengan que hacer otros ahora". Sebastián recordó que hace unos años la planta zaragozana "redujo en un 50% su plantilla".El consejero de Economía del Gobierno de Aragón, Alberto Larraz, que también asistió a la reunión en Bruselas, se mostró convencido de que "Opel puede ser perfectamente viable".
Un desconocido que busca ser una referencia de la industria
El principal candidato para hacerse con una de las marcas automovilísticas más reconocibles de Europa es un desconocido fuera de la industria de la automoción que con la compra de Opel busca convertirse en un referente del sector. Magna Internacional es una compañía austriaco-canadiense fundada en 1957 por el empresario austriaco Frank Stronach. Actualmente, la empresa emplea a 70.200 personas repartidas en 25 países. En 2008, su facturación alcanzó los 16.790 millones de euros y un beneficio de 50,3 millones, frente a los 475,3 millones de 2007. En España, la compañía cuenta con cuatro centros productivos.Su negocio, no obstante, no se limita a los componentes. En la ciudad austriaca de Graz Magna se ha especializado en la construcción de vehículos de tracción a las cuatro ruedas para grandes compañías como Mercedes-Benz, Chrysler, Saab o BMW como el todoterreno X3o la Clase M de Mercedes Benz.