Un tribunal concede tres meses de prórroga a Saab para culminara la reestructuración
El tribunal sueco de Vänesborg aceptó hoy la propuesta de la dirección del fabricante de coches Saab Automobile de prorrogar hasta el 20 de agosto el plazo para finalizar la reestructuración y relanzamiento de la empresa.
Ninguno de los 600 acreedores de la compañía, que se declaró insolvente el 20 de febrero, se opuso al aplazamiento, solicitado hace una semana y justificado por la directiva por la dificultad y amplitud de la tarea.
El plan de reconstrucción incluye la venta de la compañía, propiedad de la estadounidense General Motors, concentrar la producción en su fábrica de Trolhättan -en el sur de Suecia- y cerrar las negociaciones sobre financiación, que incluyen un préstamo del Barco de Inversiones Europeo avalado por el Estado sueco.
La compañía sueca había asegurado al presentar la solicitud de prórroga no tener problemas de liquidez gracias al uso de 45 de los 150 millones de dólares del préstamo de General Motors, y calcula que esos fondos llegarán hasta el 20 de agosto.
Saab ha admitido, sin dar nombres, la existencia de posibles compradores, entre los que se menciona a la china Geely, un grupo de inversores estadounidenses, el fabricante de coches deportivos sueco Koenigsegg y la italiana Fiat.
La firma sueca pretende alcanzar un acuerdo con el futuro comprador en los próximos días.
El tribunal de Vänersborg celebrará el próximo 17 de junio una reunión pública de negociación con los acreedores para conocer si aceptan la propuesta de Saab de pagar a corto plazo sólo el 25 por ciento de la deuda y aplazar el resto durante dos años.
La deuda de Saab asciende a 10.600 millones de coronas suecas (casi 1.000 millones de euros), y la mayor parte ha sido contraída con General Motors, con el Estado sueco como segundo acreedor.