BT entra en pérdidas y recorta plantilla y dividendo
El otrora gigante británico de las telecomunicaciones está pasando uno de sus peores momentos. El ex monopolio de Reino Unido, BT, ya sufrió con dureza el estallido de la burbuja tecnológica, hasta el punto de que tuvo que desprenderse de su filial de móvil, O2, ahora propiedad de Telefónica. Siete años después, la actual crisis le está atacando donde más le duele, en el negocio con las grandes corporaciones.
Ha sido precisamente el cargo extraordinario para cubrir la pérdida de contratos en esta división el que ha disparado las pérdidas de BT en su cuarto trimestre, a 1.074 millones. Con este lastre, la operadora entra en pérdidas en su año fiscal, con casi 100 millones de números rojos.
Con este panorama, BT no ha tenido más remedio que centrarse en el recorte de costes. El dividendo se ha rebajado sustancialmente y la plantilla se recortará en otras 15.000 personas este año, la misma cifra que en 2008.