OKI eleva sus ingresos en España un 13,2%, pero admite que la crisis ya afecta a las ventas
La compañía japonesa OKI registró unos ingresos de 235,9 millones de euros en España en su último ejercicio fiscal, concluido el 31 de marzo, una cifra que supone un crecimiento del 13,2% con respecto al año anterior. Asimismo, la firma elevó sus resultados operativos un 6,7% hasta 9,94 millones.
Por áreas de negocio, Impresión aportó el 60% del total de ingresos, con un crecimiento del 9,6%. A continuación se situó el segmento de Electrónica que aportó el 29,6% del volumen de negocio y con avance del 7%, gracias sobre todo a las ventas de televisores, que superaron el medio millón de unidades. Informática creció un 25%, Ofimática un 145% y Telecom un 100%. Esta última división, especializada en centralitas para servicios de voz IP, inició sus operaciones durante el pasado año.
La empresa, no obstante, ha admitido que en su último trimestre fiscal (de enero a marzo) se vio afectada por la ralentización económica. "En los nueve primeros meses del año habíamos registrado un crecimiento del 22%", explicó el presidente ejecutivo de OKI Systems Ibérica, Javier Toledo, en un encuentro con CincoDías. El directivo afirmó que, de cara al ejercicio en curso, el grupo se conformaría con repetir la misma cifra de ingresos del pasado año.
Toledo advirtió que el canal de distribución está sufriendo por la caída de las inversiones y el recorte de gastos por parte de los clientes. Además, aseguró que hay todavía una grave escasez de liquidez y los distribuidores están teniendo problemas para cobrar de sus clientes, incluida la Administración pública, que ha alargado los periodos de pago. Toledo, que también es responsable de OKI en Francia e Italia, indicó que en el primero de los estados la situación es más estable mientras que el país transalpino tiene los mismos problemas que España.
Como fórmula para hacer frente al impacto de la crisis, el ejecutivo dijo que OKI ha apostado por convertirse en una empresa de servicios. Así, en el área de impresión, ofrece ya a sus clientes la posibilidad de pagar sólo por páginas impresas. "Nosotros nos encargamos del hardware, la reposición del consumible y su mantenimiento, y el cliente no tiene que preocuparse por nada", indicó Toledo, quien añadió que las compañías pueden encontrar así una buena fórmula para controlar los gastos. El directivo afirmó que esta vía supone cambiar beneficio a corto plazo por asegurar la cartera de clientes a largo plazo.