Consejos para afrontar un año en blanco
La búsqueda de un empleo tras el despido dura de 6 a 18 meses
Despido y a continuación, estado de shock. Parece lo más duro del proceso y, sin embargo, la notificación del fin de la relación laboral es sólo el comienzo de una nueva situación para el directivo: de ser un profesional muy valorado a sentir que ya no vale nada. Deberá afrontar su nueva realidad, la del desempleo, como el profesional valioso y reconocido que hasta ese momento fue, pues la búsqueda de trabajo es un trabajo en sí mismo y requiere la misma disciplina, responsabilidad y dedicación que cualquier puesto directivo. Lo primero es asumir y asimilar la pérdida, señala Aintzane Aroca, socia de Zavala Gortari Asociados. Esta experta concede alta importancia a la planificación del día a día. "Es imprescindible establecer un horario, una disciplina, objetivos a corto, medio y largo y garantizar que trabajamos nuestra networky la vamos engrosando en el día a día", señala.
La búsqueda de un proyecto profesional que satisfaga al directivo lleva su tiempo. Los cálculos más realistas en estos momentos hablan de un plazo de tiempo entre 6 y 18 meses, en función de la empleabilidad del directivo y la posición a la que aspire. Conviene no olvidar que la pirámide se estrecha en la cúspide y que en la actualidad el número de ofertas, dada la coyuntura económica demercado, es menor.
Las necesidades económicas exigen tener los pies en la tierra, tanto a la hora de hacer las cuentas de cada día, como ante la perspectiva de encontrar un nuevo trabajo. Si el proyecto lo merece, el directivo debe estar abierto a reducir sus expectativas económicas y a valorar sistemas de retribución creativos; en palabras de Aintzane Aroca, "esquemas de remuneración diferentes a los que estábamos habituados".
La empleabilidad del directivo es clave para facilitar la búsqueda de un nuevo proyecto. Cuanto mayor flexibilidad ofrezca en lo que a movilidad geográfica, funcional y retributiva se refiere, más fácil será la vuelta al mercado laboral. Entretanto, el directivo ha de seguir formándose y manteniéndose lo más próximo al negocio posible. Para ello, en la medida en la que sea factible, las colaboraciones profesionales a tiempo parcial son el mejor de los esquemas hasta encontrar un proyecto que cumpla con sus expectativas. Como recuerda Aintzane Aroca, "lamentablemente, el despido no es más que el comienzo de una nueva y generalmente desconocida situación para el directivo". La de un año en blanco en su curriculum vitae. Sin recetas mágicas.