El beneficio de Codorníu baja a una cuarta parte en su último ejercicio
El beneficio del fabricante de cava Codorníu cayó en su ejercicio 2008 hasta los 7,2 millones de euros, lo que supuso una cuarta parte del registrado en el año anterior, debido a la falta de ingresos atípicos, según consta en las cuentas del grupo.
En cambio, en el ejercicio 2007 -Codorníu cierra sus cuentas a 30 de junio-, el grupo familiar registró unos ingresos extraordinarios récord por la venta de su sede en la Gran Vía de Barcelona, por la que ingresó 31,7 millones. Nunca en la historia la compañía había tenido ingresos atípicos tan cuantiosos.
La facturación del grupo consolidado en el período que va de julio de 2007 a junio de 2008 fue de 248 millones de euros frente a los 223 millones del año anterior, lo que representa una subida del 11 por ciento.
La subida de las ventas se debió a la buena evolución de toda la gama de productos en general, tanto en cava como vino, y del mercado mundial.
Este buen comportamiento de las ventas junto con un control de los gastos permitieron que el beneficio operativo antes de impuestos y amortizaciones (EBITDA) alcanzara los 17,8 millones de euros, con un crecimiento del 87%.
En los mercados internacionales tuvieron especial importancia para el grupo los de Gran Bretaña y, sobre todo, Estados Unidos.
En porcentaje, creció más el área internacional del negocio, que supone cerca del 40% del grupo que controla la familia Raventós.
La bodega de Codorníu en Napa (California) consiguió "por segundo año consecutivo resultados positivos, en línea con el plan de negocio", según consta en las cuentas anuales.
Además funciona bien la bodega de Codorníu Argentina, en buena parte gracias al mercado interior y porque los vinos argentinos tienen una buena entrada en otros mercados, como es el caso de Brasil.
Según las cuentas de 2008, "Codorníu Argentina ha llegado al punto de equilibrio con un nuevo plan estratégico que permitirá alcanzar beneficios el próximo año", señala el grupo.
Por otro lado, la deuda financiera neta sumó un total de 81 millones, de los que 75 millones fueron la deuda a largo y corto, más otros 6 millones de una emisión de obligaciones.
En el plan de inversiones de este año el grupo está siendo muy prudente ante la caída generalizada del consumo en los principales mercados en los que opera.
En las cuentas se señala que Codorníu se centrará en aumentar las ventas internacionales y "focalizar su crecimiento en las marcas de prestigio en los mercados estratégicos", lo que se refiere, básicamente, a Estados Unidos.