Arcelor presenta un ERE de un año en España para sus 12.500 empleados
ArcelorMittal negociará la semana que viene con los sindicatos un ERE de un año sobre sus 12.500 trabajadores en España. La medida se aplicará en función de las necesidades de cada planta. El grupo ha decidido parar temporalmente 14 de sus 25 hornos altos en Europa, incluido uno en Gijón.
Estamos ante el inicio de una nueva etapa'. Así comenzó ayer Gonzalo Urquijo, el único español miembro de la Dirección General de ArcelorMittal, la rueda de prensa en la que anunció las medidas que el gigante siderúrgico va a aplicar en España para hacer frente a la debilidad de la demanda. La principal, la presentación de un expediente de regulación de empleo (ERE) temporal de un año sobre los alrededor de 12.500 trabajadores que integran la plantilla en el país.
El anuncio se produjo unas horas después de que parte de la dirección de ArcelorMittal se reuniera en Luxemburgo con representantes del comité de empresa europeo para comunicarles que el grupo va a profundizar en los recortes de producción que ya ha acometido (de un 45% de media) para adaptarse a la situación real del mercado. En febrero, la producción de acero en Europa cayó un 42% hasta los 10 millones de toneladas, según datos de la Asociación Mundial del Acero (WSA por sus siglas en inglés).
La principal actuación que llevará a cabo la empresa será el cierre temporal de 14 de los 25 altos hornos que tiene en Europa, repartidos en once factorías en España, Francia, Alemania, Bélgica, Rumanía y Polonia. El grupo emplea a unas 129.500 personas en la UE, el 41% de su plantilla.
En el caso español, Urquijo confirmó que, desde mediados de mayo, se parará uno de los dos hornos de Gijón. 'No tenemos una bola de cristal y debemos ser muy prudentes sobre cuándo se recuperará la producción, pero esperemos que sea cuanto antes', subrayó el directivo español.
Ajustes generales
La parada del horno de Gijón no será la única medida incluida en el plan de suspensión temporal de la fabricación en España, que tiene como objetivo optimizar los recortes ya aplicados, equivalentes al 50% de la producción.
Así, ArcelorMittal también tiene previsto parar en mayo una de las dos plantas de sinterización que tiene en Asturias (la de Gijón); dos baterías de coque en Avilés, a partir del 20 de abril, de manera que la planta funcionará sólo con cuatro de sus ocho baterías; una línea de laminación en frío en la planta vasca de Etxebarri desde finales de junio; y una línea de electrocincado en Sagunto (Valencia), también en junio.
Asimismo, el grupo ha decidido parar temporalmente la planta de productos largos de Villaverde en Madrid, va a trasladar la producción de acero líquido de Bergara a Zumárraga e iniciará una parada temporal en Industrias Zarra, vinculada a Bergara. En Sestao, ACB mantendrá su producción al 50%, con una sola línea y paradas temporales.
Además, se mantienen las paradas ya iniciadas en el último trimestre de 2008, como las de las líneas de pintura y galvanizado de Avilés, y la de la línea de galvanizado y de un tren de laminación en Etxebarri. Por su parte, la actividad de Distribución (AM3S) en España seguirá al 50%.
Estas paradas llevarán a ArcelorMittal a presentar un ERE de un año de duración sobre toda su plantilla en España ante la Dirección General de Trabajo del Ministerio de Trabajo (afectará a 16 comunidades autónomas). Directivos de la multinacional tienen previsto reunirse a mediados de la semana que viene con representantes de los sindicatos para negociar las condiciones generales del ajuste temporal de empleo en todas las factorías.
Urquijo quiso dejar claro que lo que quiere el grupo es 'flexibilidad', de forma que la regulación se aplicará en cada una de las plantas en función de sus necesidades concretas, por lo que no quiso aventurar a cuántos trabajadores afectará de forma efectiva ni durante cuánto tiempo.
Tras insistir en el carácter temporal de los ajustes, también recalcó que todas las actuaciones se llevarán a cabo 'con pleno diálogo y en concertación con los sindicatos'. 'Somos conscientes de que las medidas anunciadas son difíciles para nuestros trabajadores pero, al aplicar ahora las iniciativas más adecuadas, estamos protegiendo el futuro a largo plazo de la sociedad y de sus empleados', apostilló.