Solbes se despide con sabor agridulce y conserva el escaño
'Me despido con sentimientos encontrados pero razonablemente satisfecho tras más de 40 años de servicio público, entre ellos casi cinco como vicepresidente'. Con esta frase se confesó públicamente el hasta ayer vicepresidente económico Pedro Solbes, en la toma de posesión de su sucesora, Elena Salgado. 'Me voy con la conciencia tranquila de quien cree que ha hecho lo correcto por mi país y por las generaciones futuras', añadió emocionado, en plena sala Carlos III, reservada en el Ministerio de Economía para actos solemnes como son los relevos ministeriales y los homenajes de quien como Solbes, comenzó en Economía como técnico comercial del Estado en 1968.
Solbes reconoció que en el departamento que ahora abandona quedan ahora 'muchas cosas por hacer' en referencia a la delicada situación de la economía española, pero resaltó que Salgado cumple con todos los requisitos para el cargo 'como lo acredita su gestión' en anteriores ministerios. La nueva vicepresidenta fue ya directora de Costes de Personal y secretaria general de Comunicaciones con el ex presidente Felipe González.
La referencia expresa de Solbes de apelar a las generaciones futuras no fue desapercibida en la sala por parte de sus principales colaboradores, en un momento en que el hasta ahora vicepresidente planteaba una mayor austeridad fiscal, ya que el aumento del déficit público está elevando el recurso a la deuda pública, a pagar en los próximos años por todos los contribuyentes. El discurso de Solbes fue aplaudido ayer por los presentes, mucho de los cuales además de subalternos han sido compañeros suyos de carrera durante decenios.
Después de su discurso y de cara al futuro, el alicantino indicó en una conversación informal que conservará 'al menos unos meses' su escaño en el Congreso de los Diputados, conseguido en las pasadas elecciones generales como número dos del PSOE por la circunscripción de Madrid.
Solbes suma a su sueldo de diputado una indemnización temporal como ex ministro y su pensión vitalicia como ex comisario europeo.