Aer Lingus anuncia la dimisión de Dermot Mannion como presidente de la aerolínea
Aer Lingus anunció hoy la dimisión del presidente ejecutivo de la compañía, Dermot Mannion, con efecto inmediato, e informó de que el actual presidente del consejo de administración, Colm Barrington, asumirá la responsabilidad ejecutiva de manera temporal hasta que se designe al nuevo presidente.
En un comunicado, la compañía destacó que el consejo de administración ya ha empezado el proceso pertinente para la selección del nuevo presidente y agradeció a Mannion su contribución "significativa" durante los cuatro años que ha estado al frente de la aerolínea.
Mannion señaló su satisfacción por haber conducido la compañía durante un periodo de "cambio profundo", agradeció a la dirección y a los empleados de la aerolínea "su compromiso" durante el tiempo que ocupó la presidencia, y confió en que el nuevo presidente incorpore "un pensamiento fresco y nuevas ideas al negocio".
Por su parte, Barrington añadió que el nuevo equipo directivo concentrará sus esfuerzos en maximizar los ingresos de la aerolínea, reduciendo sus gastos operativos y contribuyendo a mantener a la compañía en una posición fuerte.
De esta forma, se confirma la noticia de que el presidente ejecutivo de Aer Lingus, se disponía a dejar su cargo, tal y como adelantaba el domingo el periódico 'The Sunday Business Post'.
Según este periódico, que cita fuentes cercanas, la salida de Mannion se produce de "forma amistosa" y tras ver frustrados sus intentos de extensión de la compañía, golpeada por la crisis económica y por la competencia en muchas de sus rutas.
Mannion, que resistió hasta en dos ocasiones los intentos de Ryanair por adquirir la aerolínea desde que asumiera el cargo en 2005, fue además objeto de controversia cuando se hizo público que el antiguo presidente de Aer Lingus John Sharman aprobó un cambio de contrato para el ejecutivo que incluía el pago de hasta 2,8 millones de euros (3,74 millones de dólares) en caso de que Aer Lingus fuese adquirida, modificación que fue rescindida posteriormente.
Aer Lingus registró en 2008 unas pérdidas de 17,6 millones de euros y ya entonces la compañía advirtió de que podrían elevarse a más de 50 millones de euros este año.