Los banqueros de EE UU expresan su apoyo a la política económica de Obama
Los grandes banqueros estadounidenses han dado su apoyo al plan del presidente Barack Obama para que libre de deudas incobrables a las instituciones financieras, pero anunciaron que no hubo acuerdo en todos los puntos.
"El mensaje clave es que estamos todos juntos en esto", apuntó, acompañado por otros ejecutivos bancarios, John Stumpf, presidente ejecutivo de Wells Fargo, a los periodistas tras la reunión. Los comentarios de los banqueros sobre la reunión fueron quedaron en un segunda plano por las declaraciones sobre las condiciones del negocio en marzo.
El presidente ejecutivo de JPMorgan Chase, Jamie Dimon dijo que "marzo ha sido un poco duro" y su colega de Bank of America, Ken Lewis, agregó que el "libro de operaciones de marzo no fue tan bueno" como en los primeros dos meses del año, lo que presionaba a los títulos bancarios y al mercado en general.
La reunión en la Casa Blanca se produjo en la antesala de una cumbre del G-20 de la próxima semana, donde se espera que Obama presente a los demás líderes mundiales sus planes para sacar a la economía estadounidense de la recesión. Obama hizo hincapié en la importancia de hacer algo con los activos tóxicos, dijo el portavoz de la Casa Blanca, Robert Gibbs.
"El presidente comenzó hablando de la importancia de hacerse cargo de los activos tóxicos y de que los bancos comenzaran a prestar dinero de nuevo", dijo Gibbs en una rueda de prensa. "Es apropiado decir que estuvieron de acuerdo en la necesidad de poner al día el marco regulatorio", añadió.
Los grandes banqueros, a quienes Obama ha fustigado por tomar grandes bonos al mismo tiempo que les instaba a promover el crédito, dijeron que no hubo acuerdo en todos los asuntos. Dimon comentó que Obama realizó muchas preguntas, pero que no les solicitó que dejen de debatir una pronta devolución de fondos de rescate gubernamental.
Dimon dijo al canal de noticias CNBC que "sabemos que se cometieron errores" en las compensaciones de ejecutivos, un asunto que generó una ola de rabia en todo Estados Unidos. Ken Lewis de Bank of America apuntó en tanto que todos entendieron que la "era dorada" de las compensaciones bancarias se acabó.