Falcone continúa el incremento de posiciones cortas en BBVA y Santander
El inversor Philip Falcone volvió hoy a declarar a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) nuevos aumentos de sus participaciones en posiciones cortas en el Banco Santander, que llegan ya al 0,42% del capital de la entidad, y en el BBVA, hasta el 1,15%.
Las posiciones cortas se toman cuando el operador o inversor cree que el precio del activo financiero está sobrevalorado y va a bajar, en cuyo caso procede a su venta con la intención de recomprarlo por un precio inferior y lograr así ganancias.
Los títulos del Santander ganaron en la sesión bursátil de hoy un 12,50% y protagonizaron la mayor subida del Ibex al cerrar 4,50 euros, mientras que el BBVA avanzó en Bolsa un 9,40%, hasta 5,12 euros.
Los fondos de inversión libre (hedge funds) Harbinger Capital Partners Master y Harbinger Capital Partners Special, gestionados por Falcone, han incrementado en las últimas semanas su participación en posiciones bajistas en las principales entidades españolas.
Según la comunicación de hoy, Falcone controla ya 43 millones de acciones del BBVA, títulos que tienen un valor de 220 millones de euros a precios del mercado de renta variable. En cuanto al Santander, el inversor posee 37 millones de títulos, con un valor de 166,5 millones de euros.
Harbinger Capital ha ganado millones de euros en los mercados de renta variable europeos apostando por bajadas de precios de valores, especialmente en el sector de la banca, lo que ha contribuido, según destacaron fuentes del mercado, a incrementar las caídas sobre el parqué de algunas de las entidades en las que invierte con posiciones cortas.
El presidente de la Asociación Española de Banca (AEB), Miguel Martín, consideró hoy que, en tiempos de crisis, deberían prohibirse las llamadas posiciones cortas en la Bolsa, para evitar el castigo que están sufriendo algunas entidades en su cotización.
En tiempos de estabilidad financiera, las posiciones cortas "son correctas" porque "ayudan a formar los precios", dijo Martín, que añadió que cuando no existe esa estabilidad, lo que ocurre es lo contrario, y esas operaciones "producen desequilibrios", por lo que, a su juicio, se deberían prohibir.