Wall Street cae a mínimos de 1997 por el temor a un derrumbe del sistema financiero
Nueva debacle en la Bolsa de Nueva York, que día tras día muestra su preocupación ante las recapitalizaciones y rescates a empresas con problemas. La recién ayudada AIG ganó un 7,17% a costa de un Dow Jones que cayó un 4,24% y pierde la barrera de los 7.000 puntos.
Tanto rescate, Citigroup, Bank of América y el último de AIG, ha terminado por desorientar a los inversores, que ya no hacen más que dudar de la estabilidad del sistema. Lastrados por unos índices macroeconómicos que no remontan, los índices perdieron más de un 3,5% de su valor. El Standard and Poors 500 perdió un 4,66% y se tambalea peligrosamente sobre los 700,8 puntos, mientras que el Nasdaq cedió un 3,99%.
Si la semana pasada el Gobierno de EE UU empezó a controlar el 36% de Citigroup, ahora ha vuelto a dar 23,800 millones a AIG para garantizar su supervivencia en el mercado. Los inversores cada día tienen más dudas sobre el sistema, pues ven como a diario las empresas recurren al Tesoro para salir adelante y esto se está haciendo notar en las Bolsas.
Todas, las 30 empresas que cotizan en el Dow Jones, finalizaron la jornada en rojo. Este es una muestra inequívoca del pesimismo que se vive en el parqué. El sector bancario volvió a ser el más castigado en una sesión que no dio tregua en ningún momento. Citigroup fue nuevamente el farolillo rojo de la jornada con un descenso del 18,67%, después de las turbulencias de la semana pasada.
Aparte de la banca, hay algunas empresas de otros sectores que también han entrado en una dinámica peligrosa. General Motors perdió un 11,11% y sigue en caída libre mientras se duda de su viabilidad. Con menores problemas, aunque lastrada por su brazo financiero, General Electric cayó un 10,93%, mientras la empresa de aluminio Alcoa, retrocedió un 12,52%.
Durante la jornada, se conocieron algunas referencias macroeconómicas nada halagüeñas para los inversores. El índice que mide la actividad del sector manufacturero, se contrajo nuevamente, y ya son trece meses consecutivos de caída. Algo mejor fue el dato de gasto personal, que subió 0,6 puntos porcentuales, para romper una racha de meses cayendo.
El mercado de las materias primas no pudo mantenerse alejado de estas turbulencias y sufrió las consecuencias. El petróleo Texas, de referencia en EE UU, cortó su racha alcista y se depreció un 10%, que sitúa el precio del barril en 40,15 dólares.