Bigmat prevé elevar sus ventas pese a la crisis del ladrillo
El grupo de distribuidores de materiales de construcción Bigmat prevé un nuevo año de crecimiento en España pese al mal momento que atraviesa la obra residencial. Tras cerrar 2008 con unas ventas de 730 millones, sus estimaciones son de 750 millones para 2009.
Los 147 almacenistas asociados pretenden hacerse fuertes ante la crisis con la incorporación de nuevos miembros y la negociación de condiciones favorables con las entidades financieras. Bigmat, que hace de central de compras y distribución para sus clientes, espera captar este año entre 12 y 15 nuevos socios, tras firmar 21 entradas en 2008, y el mensaje para conseguir esa meta tiene que ver con el momento económico: 'Un establecimiento asociado tiene cinco veces más oportunidades de mantenerse en el mercado que un independiente', señala la empresa.
Su presidente, Luis Pérez, reconoce que la creciente morosidad y la sequía de crédito están impactando de lleno en el sector. Dos problemas a los que se suma la caída en picado de la construcción. Sin embargo, Pérez aprecia una tabla salvadora en la reforma de hogares y el bricolaje.
Los integrantes de Bigmat suman 1.500 empleados y representan a 252 puntos de venta repartidos por todo el país. Entre las claves para mantener el margen de rentabilidad figura la puesta en marcha de una plataforma logística de 17.000 metros cuadrados en un punto estratégico: la localidad de Onda (Castellón), donde se genera gran parte del mercado de pavimento cerámico. Esta central sirve para que los asociados negocien las compras como un gigante de 252 almacenes y no de forma individual. Además, la existencia del almacén ha conseguido reducir el stock de todos ellos.
La otra línea de trabajo tiene que ver con mejorar las condiciones de acceso al crédito: 'Estamos negociando con los bancos y con el Instituto de Crédito Oficial para conseguir circulante para nuestros asociados. De otra forma no pueden afrontar nuevas aperturas'.
Nacida en Francia en 1981 y con presencia en Italia, Bélgica y España, cada uno de los almacenes independientes de construcción vinculado a Bigmat compra una acción de 6.000 euros y posteriormente aporta una cuota en función de su volumen de ventas. A cambio se benefician de unas condiciones exclusivas de compra con la cartera de proveedores de Bigmat. Entre las condiciones para entrar en el grupo figuran una experiencia mínima de cinco años y un volumen de negocio a partir de los tres millones anuales.