Moncloa será juez en la pugna de Defensa y Fomento sobre las nuevas aerovías
El Gobierno y las patronales de aviación comercial se reúnen mañana para abordar una redefinición del espacio aéreo que permita el uso civil de aerovías que hoy son exclusivamente militares. A fin de desbloquear el proyecto, Fomento y Defensa han aceptado el arbitraje de Moncloa para resolver puntos en los que haya desacuerdo.
Los Ministerios de Fomento y Defensa tienen mañana una cita importante con las patronales del sector de las aerolíneas comerciales. El objetivo del encuentro es dar a conocer al sector de la aviación civil los avances conseguidos en el plan por el que se pretende que aviones comerciales puedan utilizar, en determinadas zonas y en determinados momentos, espacios aéreos y aerovías que hasta hoy están reservados en exclusiva para uso militar.
Uno de los aspectos más sobresalientes de los avances conseguidos en el seno de la comisión interministerial en la que Fomento y Defensa discuten el nuevo mapa de aerovías, consiste en el pacto alcanzado entre ambos departamentos para dar capacidad de arbitraje a Moncloa en aquellos aspectos en los que no logren un acuerdo.
Fuentes conocedoras de los contactos aseguraron que para actuar de árbitro en estos casos se ha propuesto al equipo del gabinete del presidente del Gobierno, al frente del que se encuentra José Enrique Serrano.
La definición de un nuevo mapa de rutas aéreas busca que, en el esquema que se está diseñando, las aerovías tengan un trazado sin servidumbres que permitan llevar a destino a los aviones por la línea más directa.
La posibilidad de que las aeronaves comerciales puedan "pisar" espacio aéreo militar les permitirá reducir un promedio de entre dos y siete minutos un vuelo de una hora con los correspondientes ahorros en combustible y de emisiones de CO2.
El permiso que dará Defensa para estas prácticas podrá ser permanente o sólo para algunas franjas horarias en el día cuyo uso para fines militares sea nulo.
Las aerovías que van a ser reformadas son 14 o 15. El contenido de las modificaciones en sus rutas "es extraordinariamente técnico", según fuentes conocedoras del proyecto.
Un ejemplo de actuación que puede dar una idea de los fines que se persiguen la encontramos en la propuesta de autorización del sobrevuelo del espacio aéreo de la base militar de Matacán en Salamanca. Hasta la fecha los aviones que vienen o se dirigen a de destinos en América tienen que dar un rodeo para respetar su área de influencia.
La mayoría de estos sobrevuelos se hacen de madrugada o al caer del día, coincidiendo con los horarios en los que la base de Matacán no está operativa. La autorización del uso civil sería en este caso para determinadas franjas horarias, pero aportaría significativos ahorros a las aerolíneas.
El sector de la aviación comercial en España lleva años solicitando que se aborde esta reforma, pero su voz se dejó sentir con mayor fuerza el verano pasado a raíz de la brutal escalada de los precios del petróleo que llegaron ha situarse por encima de los 140 dólares el barril. Cualquier ahorro de tiempo de vuelo con esas tarifas de combustible resultaba un alivio para el balance de las compañías.
Fue entonces cuando Aviación Civil y las asociaciones patronales del sector aéreo constituyeron una comisión paritaria en la que se elaboró una batería de once propuestas sobre reestructuración del espacio aéreo que han sido valoradas y discutidas en la comisión interministerial de Fomento y Defensa.
Ahora el precio del petróleo se ha desplomado y se ha situado en niveles entorno a los 45 dólares por barril. A pesar de ello la reforma sigue siendo "imprescindible y urgente" según afirman las patronales de la aviación comercial.
Cielo único para la península ibérica
Animados por los planes que impulsa la Unión Europea a nivel continental, los operadores de navegación aérea de España y Portugal, AENA y ANA, han venido manteniendo en los últimos meses diversas reuniones para avanzar en la creación de un esquema de cielo único para todo el territorio de la península Ibérica. Se han formulado diversos escenarios y se trabaja en la formalización de los primeros acuerdos operativos. De esta manera, la península Ibérica podría convertirse en el primer territorio de la Unión Europea en el que se ha avanzado en la constitución del llamado cielo único.La Unión Europea entiende que la mejor manera de acercarse a esta suerte de integración continental por las alturas es avanzar en la coordinación de las distintas estructuras de control de navegación aérea competencia de cada uno de los países miembros. En este empeño, Bruselas ha definido lo que denomina "bloques funcionales", esto es, territorios en los que es posible realizar integraciones pluriestatales de diferentes espacios aéreos.Por otra parte, las patronales aéreas mantendrán en los próximos días un encuentro con responsables de Fomento con el objetivo de discutir en que condiciones se va a integrar a las distintas compañías aéreas españolas en el mercado de las emisiones de CO2.