_
_
_
_
Mayor presencia

El Gobierno asesorará a pymes para lograr contratos públicos en el exterior

El Ejecutivo ultima los detalles del plan Licita, con el que pretende elevar la participación de España en los contratos en organismos multilaterales, que apenas llega al 0,8% del total. España financió a estas instituciones con 815 millones en 2006 y sólo obtuvo un retorno de 282 millones en contratos, tres veces menos.

El Ejecutivo está dispuesto a que la representatividad de las empresas españolas en los organismos multilaterales, como el Banco Mundial o el Banco Asiático de Desarrollo, tenga un reflejo en el número de contratos que obtienen las empresas.

Para ello ultima los detalles de un plan para impulsar la participación de las empresas, en especial las pymes, en los contratos licitados por estos organismos. El proyecto, que será presentado oficialmente en marzo y se denominará Licita, pretende abrir un mercado de oportunidades para las empresas españolas por valor de 12.000 millones de euros, según los cálculos que maneja el Ministerio de Economía, en especial en el campo de la consultoría. Este plan llevaba más de dos años parado y finalmente ha salido adelante gracias al acuerdo firmado la pasada semana entre la Secretaría de Estado de Comercio y la de Economía.

El primer gran objetivo reflejado en el texto es implicar a los representantes españoles en los organismos multilaterales incorporándolos al centro de información administrativa que tiene el Instituto de Comercio Exterior (Icex). En este servicio, que atiende una media de 110.000 consultas al año, se integrarán también los representantes de las oficinas comerciales de España en el extranjero. El Icex dispone de tres delegaciones que se encargan de los contratos multilaterales, en Bruselas, Manila y Washington. Los empresarios quieren que se amplíe esta red hacia los países en donde se concentra el grueso de los contratos.

El plan Licita creará también un servicio de asesoría personalizada a pymes, que será gestionado por el Icex y que se centrará en la búsqueda de socios empresariales en los países en desarrollo. Con este objetivo se potenciarán los foros y encuentros empresariales entre consultoras españolas y empresas en los países de desarrollo. Este último punto responde a las reivindicaciones expresadas por las consultoras, que son uno de los colectivos más beneficiados por los contratos de estas instituciones.

Finalmente se reforzarán las misiones comerciales de empresas a instituciones multilaterales, así como las visitas de delegaciones de esos organismos a España, con el fin de aumentar el conocimiento mutuo sobre las posibilidades de negocio.

Equilibrio

El objetivo final del plan Licita es encontrar un equilibrio entre lo que aporta España a estos organismos y lo que recibe en contratos. Algo que no ha sucedido hasta ahora. En 2006 se realizaron operaciones comerciales en todo el mundo por un valor de 35.000 millones de euros, a los que España apenas retornaron 282 millones (un 0,78% del total) en forma de contratos. Esta cifra representa casi tres veces menos de lo que aportó a estas instituciones en el mismo ejercicio (815 millones de euros) y está muy por debajo de otros países de nuestro entorno como Alemania, Francia, Reino Unido o Italia.

Sólo los contratos que obtuvo Italia a través del Banco Europeo para la Reconstrucción y el Desarrollo (Berd) equivalen a todo el retorno que obtuvieron las empresas españolas, mientras que los firmados por Francia con el Banco Africano de Desarrollo (Bafd) triplican los obtenidos por España en el mismo periodo.

Escasa presencia en Naciones Unidas y en el continente asiático

Los informes que maneja Economía reflejan que la posición de España en cuanto al número de contratos es satisfactoria en el Banco Mundial y en el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), por la fuerte presencia de empresas españolas en Iberoamérica. Las operaciones puntuales en Marruecos también le dejan en un buen puesto en el Banco Africano de Desarrollo. Todo lo contrario que ocurre en el Banco Asiático para el Desarrollo, 'la asignatura pendiente por la ausencia de empresas en ese continente' y en Naciones Unidas, aunque este último caso es diferente.Pese a ser el organismo que más presupuesto tiene para operaciones comerciales (7.751 millones de euros en 2007), España apenas tiene participación en el mismo, puesto que la mayoría de contratos que saca a concurso están relacionados con cereales y materias primas que España no produce o con trabajos de poco importe, que suelen ir a parar a empresas locales.

Los exportadores piden un perfil más comercial para los técnicos

La aprobación de un plan específico para que el protagonismo de España en los organismos multilaterales crezca es bien recibida por las empresas que venden en el exterior.Sin embargo, Balbino Prieto, presidente del Club de Exportadores, critica que no existen perfiles comerciales entre los funcionarios españoles en los organismos multilaterales y que hay una desinformación muy fuerte por parte de las empresas. 'Las posibilidades de participación en este tipo de contratos no se da a conocer lo suficiente y no hay grandes expertos dentro de las compañías', señala.Prieto recalca que Reino Unido y Francia llevan mucha ventaja en este tipo de contratos y solicita un fuerte crecimiento de las misiones inversas entre las empresas exportadoras y los organismos multilaterales. 'En 2005 una visita de una delegación de Naciones Unidas a España provocó que el número de empresas interesadas en acceder a sus licitaciones se triplicara', afirma.

Las Cámaras ofrecen ya asistencia técnica a 65 empresas

El Consejo Superior de Cámaras de Comercio es pionero en el asesoramiento a las empresas que quieren competir en los contratos multilaterales. En 2008 puso en marcha el programa de Iniciación a las Licitaciones Internacionales y este año pretende captar a más de 65 empresas para que se integren dentro del proceso de formación previo a las licitaciones. El objetivo es incorporar a ese mercado a unas 200 pymes.Y para ello está realizando jornadas en las cámaras provinciales para localizar a las pymes de aquellas regiones que aún no han convergido en renta con la UE y que cumplan el perfil idóneo. 'Los bienes y servicios ofrecidos deben ser muy demandados en los concursos internacionales, tener alto valor añadido, ser competitivos en precios y calidad y haber tenido un proceso previo de preparación a la exportación a través del Icex', indica el programa. Una vez seleccionadas las empresas, el periodo de formación se prolonga durante nueve meses, en el que un especialista asesora personalmente a la empresa para presentar la oferta.

Archivado En

_
_