Vueling y Clickair operarán juntas en verano con un tercio de aviones menos
Tras superar el escollo de la Comisión Europea, la nueva Vueling cobra cuerpo. Su presidente, Josep Piqué, avanzó ayer que Vueling y Clickair operarán de forma conjunta en junio, aunque con una reducción de flota de hasta el 32%. Ambas tenían 44 naves en verano de 2008, cifra que puede reducirse hasta 30. Piqué reconoció el carácter defensivo de la operación y anticipó ajustes de plantilla 'no traumáticos'.
El próximo mes de junio es el horizonte que se han fijado Vueling y Clickair para iniciar sus operaciones como una única compañía. El actual presidente de Vueling, Josep Piqué, que se perfila como presidente ejecutivo de la aerolínea en su nueva andadura, anticipó que la unión de ambas configurará una empresa 'con números negros' este mismo año. Piqué dio a conocer las principales magnitudes de la operación acompañado del consejero delegado de Vueling, Lars Nygaard, pero sin la presencia de ningún directivo de su rival Clickair.
El presidente de Vueling indicó que las condiciones impuestas por los organismos de Competencia de la Comisión Europea para aprobar la operación 'son perfectamente asumibles'. Ambas compañías deben ceder posiciones en 19 rutas, siete de ellas nacionales, lo que permitirá 'garantizar la competencia y la libre elección'. Tanto Vueling y Clickair han ido cediendo naves o renunciando a pedidos de aviones en los últimos meses, con lo que la flota con la que trabajaban en un inicio ambas empresas para configurar una nueva compañía ha sido modificada.
Las dos compañías contaban con 44 aviones en la temporada de verano 2008 (un total de 24 Clickair y 20 Vueling), mientras que en la actualidad disponen de 17 naves cada una. Entre las previsiones de Piqué se encuentra que la aerolínea fusionada cuente con una flota de entre 30 y 35 aviones 'según las condiciones del mercado', lo que supone una reducción de entre un 20% y un 32% frente al verano pasado. 'Prefiero una compañía así, que una de 60 aviones pero que no dé beneficio a sus accionistas'.
Piqué avanzó que en 2010, primer ejercicio completo de operaciones de la nueva Vueling, los ingresos de la aerolínea superarán los 800 millones de euros y su Ebit (beneficio antes de impuestos e intereses) será de 50 millones. La aerolínea transportará 11 millones de pasajeros y volará a 39 destinos. La operación en curso supondrá ajustes de plantilla, que calificó como 'no traumáticos'.
En el último año cerca de 200 personas, un 15% de la plantilla, ha abandonado Vueling. El ex ministro reconoció que la operación en marcha tiene 'carácter defensivo' frente a la actual coyuntura económica pero no 'imprescindible para sobrevivir'. Así, reiteró que la unión les sitúa en una posición de ventaja frente a otros competidores y le permitirá operar con ambición. Tras el visto bueno de las autoridades europeas, el proceso de fusión debe volver a ser sometido a aprobación por los consejos de administración de ambas compañías y ratificarse en sus juntas de accionistas.
Piqué no concretó la ampliación de capital que conllevará la operación. Ambas compañías deberán equipararse patrimonialmente primero, lo que implicará 'eventuales aportaciones por parte de accionistas'.
La unión de ambas dejará a Iberia como máximo accionista de la compañía, ostentando entre el 40% y el 45% del capital, seguida de Inversiones Hemisferio con el 14%. Nefinsa, uno de los socios de Clickair, controlará el 5% y otros minoritarios de la actual Vueling el 6%.
Autonomía de Iberia
El actual presidente de Vueling advirtió que la nueva aerolínea se gestionará 'con absoluta independencia' de su socio industrial de referencia, Iberia. Vueling mantendrá su presencia en el corredor Madrid-Barcelona, donde opera Iberia.
Despolitizar la operación de Spanair
La posible compra de Spanair por parte de empresarios catalanes debe llevarse a cabo siguiendo 'criterios empresariales y no políticos', en opinión de Piqué. Las labores de la Generalitat y el ayuntamiento de aglutinar un grupo de accionistas para la filial de SAS son 'legítimas' siempre que se garantice una competencia en iguales condiciones que el resto de aerolíneas. 'Esperamos una correcta utilización de los recursos público', sentenció.