El déficit por cuenta corriente en Estados Unidos bajó el 3,7% en el tercer trimestre
El déficit por cuenta corriente de Estados Unidos cayó el 3,7% en el tercer trimestre y se situó en 174.100 millones de dólares, según informó hoy el Departamento de Comercio.
El déficit cayó más de lo previsto, debido al auge de las exportaciones, que ayudaron a compensar un aumento de las importaciones de petróleo. Los datos divulgados hoy son el barómetro más amplio de la balanza comercial al incluir no sólo el intercambio de bienes y servicios, sino también los flujos de inversión entre países.
Los economistas esperaban que el déficit entre julio y septiembre se situara en los 178.800 millones de dólares. Este déficit supone el 4,8% del Producto Interior Bruto (PIB) del país, frente al 5,1% del segundo trimestre.
En opinión de los expertos el déficit seguirá cayendo en los próximos meses debido a un descenso de las importaciones de bienes de productos extranjeros, debido a la recesión. La balanza por cuenta corriente es la medida más amplia de las relaciones comerciales estadounidenses con el resto del mundo porque incluye no sólo el comercio de mercancías y servicios, sino también los flujos de inversión.
Las exportaciones de bienes subieron a 346.500 millones contribuyendo a una reducción del déficit de bienes, mientras que las importaciones subieron a 561.200 millones. El déficit comercial, que representaba la mayor parte del desequilibrio de la cuenta corriente, se redujo un dos por ciento y pasó a 176.500 millones en el tercer trimestre desde los 180.100 millones de los tres meses anteriores.
Estas cifras, no ajustadas a la inflación, se deben sobre todo al descenso del precio del petróleo, que ha caído en estos meses al nivel más bajo en cuatro años, al situarse en 40,8 dólares por barril, frente a los 147 dólares que se pagaba en julio.
El superávit de servicios aumentó en este periodo a 38.200 millones, mientras que el excedente en los ingresos por inversiones ascendió a 30.800 millones (un 9,2% más). Las inversiones directas en Estados Unidos crecieron a 66.100 millones, por debajo de los 105.300 millones registrados en el trimestre anterior.
En el caso de las inversiones de Estados Unidos en el exterior, éstas crecieron 56.900 millones entre julio y septiembre, también por debajo de los 84.000 millones del segundo trimestre.
El Departamento de Comercio revisó el déficit del segundo trimestre a la baja y quedó en 180.900 millones de dólares, frente a los 183.100 millones anunciados previamente.