El mal tono de los mercados persiste tras el plan del G-20
La reunión del G-20 celebrada el pasado fin de semana no logró el efecto balsámico que buscaban los mercados. Los inversores ignoraron las buenas intenciones y las promesas que llegaron de Washington para centrar la atención en la realidad de los datos económicos y empresariales. Las ventas se impusieron y el Ibex perdió un 3,77% arrastrado por la debilidad de los bancos y Telefónica.
Los esfuerzos de las autoridades no logran tranquilizar a los mercados. La constatación día a día de que las desaceleración económica es más veloz de lo que se pensaba en un principio domina el devenir de los mercados. Noticias ayer como la entrada en recesión de Japón o los despidos masivos de Citi propiciaron otra sesión de pérdidas.
Europa amaneció teñida de rojo y las ventas se fueron acelerando con el paso de las horas hasta rondar el 3% de media. Wall Street aguantó casi toda la jornada, pero acabó desplomándose un 2,29% en el caso del Nasdaq y un 2,63% en el del Dow Jones. Las principales conclusiones de la cumbre del G-20: la necesidad de adoptar políticas fiscales más agresivas para reactivar las economías, la conveniencia de regular los mercados financieros que aún no lo están y el compromiso de no entrar en una carrera proteccionista no pueden al pesimismo bursátil.
'Un comunicado lleno de buenas intenciones y la promesa de volverse a reunir en breve no servirá para devolver la confianza a los mercados', comentaban ayer desde Link. Los inversores echaron en falta medidas más concretas y ante la debilidad del entorno optaron por vender.
La primera decepción del día llegó de Japón. La economía nipona se contrajo el 0,4% en el tercer trimestre, después de retroceder el 3,7% en el segundo, un dato que confirma la recesión cuando el consenso esperaba una expansión del 0,1%. Una mala noticia que vino acompañada por la advertencia de las autoridades japoneses de que en los próximos meses el panorama se deteriorará de manera pronunciada. El Nikkei, pese a todo, logró anotarse el 0,71% ayer.
No ocurrió lo mismo en Europa. Los inversores prefirieron vender desde el inicio de la sesión y los principales índices registraron pérdidas que oscilaron entre el 2,38% del Footsie y el 3,8% del Euro Stoxx. Todos los sectores del índice Stoxx cayeron sin excepción aunque los principales castigos fueron para la automoción (-5%), con el mercado pendiente del futuro del sector, la banca (-4,5%), presionada por las expectativas de nuevas ampliaciones de capital, y los minoristas (-3,15%), afectados por la caída de las ventas.
En España, las mayores caídas del día correspondieron a Sacyr Vallehermoso (-10%) y Ferrovial (-8,12%), aunque los retrocesos de Santander (-8,12%), BBVA (-5,25%) y Telefónica (-3%) restaron 208 de los 333 puntos que perdió el índice en la sesión. Castigos que provocaron que el Ibex perdiera la cota de los 8.500 puntos, en concreto cerró en 8.498,8, lo que implica que el castigo acumulado en el año alcanza ya el 44%.
Para muchos, una de las pocas lecturas positivas de la sesión es que el mercado español, al menos, se mantiene por encima del mínimo anual que marcó a finales de octubre cuando perdió la cota de los 8.000 puntos. 'Si no se pierden los mínimos del año cabe la posibilidad de que el mercado se mueva entre los 8.000 y los 8.500 puntos', comentaba ayer Nicolás López, de M&G Valores.
El problema es que los datos económicos y empresariales pintan un escenario poco esperanzador. Después del pésimo dato de ventas minoristas publicado el pasado viernes en EE UU, el índice manufacturero de Nueva York cayó a -25,43 en octubre, la peor lectura desde que se creó el índice en 2001. La única alegría la dio la producción industrial al subir más de lo esperado, un 1,3% frente al 0,2% previsto.
Así, la preocupación por la recesión crece, más aún cuando las noticias que llegan del terreno empresarial también constatan el deterioro de los beneficios y expectativas de muchas empresas. Citi, una de las últimas en mover ficha, se ha visto obligada a anunciar otros 50.000 despidos tras los 23.000 ya realizados en el último año. Pero ayer las malas noticias no quedaron ahí y los resultados peores de lo esperado de las distribuidoras Lowe y Target contribuyeron también a mermar el sentimiento del mercado. 'Hay oportunidades, pero un rebote en V va a ser difícil. El día a día de la economía es complicado', resume Alicia Jiménez, de SelfTrade.
Volumen
¦bull; Las caídas del mercado se produjeron ayer con poco volumen de negocio. En concreto, en el mercado continuo se intercambiaron acciones por un total de 2.961,4 millones de euro, una cifra muy inferior a la media de octubre de 5.038,7 millones de euros.¦bull; Santander (787,8), Telefónica (623,8), BBVA (295,6), Iberdrola (167,3) y los derechos de Santander (165,4) fueron los títulos que más millones de euros movieron.