Las empresas españolas destinan el 60% de su beneficio al pago de impuestos
Las empresas españolas destinan el 60,2% de sus beneficios al pago de impuestos, lo que las sitúa como las terceras entre los países industrializados con mayores cargas fiscales, sólo superadas por las italianas (73,3%) y las francesas (65,4%), según un estudio elaborado por el Banco Mundial en colaboración con PricewaterhouseCoopers.
La mayor parte de estas cargas van destinadas a la tributación de salarios y cotizaciones sociales, que suponen hasta un 37,2% de los beneficios empresariales, mientras que otro 22,2% se destina al pago del Impuesto sobre Sociedades y otros impuestos que gravan su actividad.
El informe, que compara los diferentes regímenes fiscales para las empresas de 181 países, indica que la complejidad y el elevado peso de la fiscalidad en los beneficios de las compañías desincentiva la inversión privada y la entrada de capital extranjero, hasta el punto de que "un aumento del 10% de la fiscalidad que grava los beneficios se traduce en una caída de dos puntos porcentuales en la ratio inversión/PIB".
Con todo, el informe destaca España se sitúa en la zona media de la tabla respecto a la parte de beneficios que las empresas dedican al pago de los impuestos que directamente gravan su actividad, en mejor posición que EE.UU. (23%), Japón (34%) o Italia (28%).
Hacia una fiscalidad más sencilla
En beneficio de las empresas españolas, el informe pone de manifiesto que la complejidad de esta tributación de los beneficios ha disminuido en el último año. Así, España es ya el noveno país industrializado cuyas compañías dedican menor tiempo en cumplir con el fisco, tras ganar tres posiciones respecto al pasado año.
Concretamente, las compañías españolas emplean 33 horas anuales al cumplimiento de sus obligaciones tributarias -tres menos que el pasado año-, frente a las 180 horas que necesitan las empresas japonesas o las 99 horas que emplean las estadounidenses. Si bien, estos procesos administrativos sólo llevan 30 horas en Alemania o 26 horas en Francia.
En cuanto al número de veces anuales que las empresas tienen que pagar sus impuestos, España, con 8 ocasiones, se sitúa en el grupo de cabeza dentro de los países industrializados. Los países más avanzados en este capítulo son Suecia (2), Noruega (4) y Reino Unido (8). Con todo, el informe subraya que el sistema fiscal español obliga a un menor número de pagos que otros como el alemán (16) o el francés (11).