Colonial dice que el ex presidente dejó la firma voluntariamente
La inmobiliaria Colonial aseguró ayer ante la juez que sigue el caso de las indemnizaciones de la compañía que al anterior consejero delegado y presidente, Mariano Miguel, abandonó el grupo 'de forma voluntaria', informan fuentes presentes en el juzgado, para eludir así el pago de blindajes acordados anteriormente.
Mariano Miguel reclama a la compañía el pago de 4,5 millones de euros por su salida de la empresa, producida cuando varios bancos tomaron el control de la inmobiliaria, el pasado mes de abril. La empresa informó el 17 de octubre que tomó la decisión de no pagar las indemnizaciones anteriormente acordadas por considerar que esos contratos sobre retribuciones 'no respetaban las principales recomendaciones de buen gobierno corporativo'.
Además de Mariano Miguel, los ex consejeros de Colonial Francisco Molina y Juan Ramírez y los ex consejeros de Riofisa (adquirida por Colonial a principios de 2007) José María Riesgo y Jaime Barón han demandado a la inmobiliaria por el impago de indemnizaciones que suman 23 millones de euros (13,2 millones excluida la retención del 43%). La empresa aseguró en un comunicado enviado a la Comisión Nacional del Mercado de Valores que ha modificado la retribución de los consejeros 'procurando' que ésta ahora 'sea moderada en función de la situación de la compañía'. Mariano Miguel ocupó el puesto de presidente de Colonial tras la salida de Luis Portillo, a finales del pasado año, y mantuvo también el cargo de consejero delegado.
Las fuentes consultadas explican que Colonial trata de que la juez del juzgado de lo social de Madrid se declare no competente en la materia y que el caso sea desviado a un juzgado de lo mercantil.
La compañía, que tiene previsto presentar sus resultados el próximo viernes, declinó ampliar esta información. Colonial registró en los primeros seis meses del año unas pérdidas de 2.381 millones de euros, frente al beneficio de 316,3 millones logrado en el mismo periodo de 2007.