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Construcción

Las constructoras acusan la restricción en la cobertura de los seguros de crédito

El creciente deterioro en la dinámica de pago de las constructoras está motivando un blindaje anticrisis entre las aseguradoras del riesgo de operaciones a crédito. Las empresas del ladrillo y sus proveedores se quejan de no encontrar coberturas para sus transacciones, mientras suben más de un 20% las primas que deben asumir.

El cuello de botella que supone la sequía de liquidez se está estrechando para las constructoras. Una preocupante derivada de la crisis del ladrillo se manifiesta ahora en la dificultad para asegurar las transacciones entre estas compañías y sus proveedores. Un servicio cada vez más caro y restrictivo que prestan entidades como Crédito y Caución, Coface, Cesce, Mapfre y Euler Hermes.

'Tengo que servir miles de euros en materiales para una promoción de pisos y nadie me cubre ante un posible impago', lamenta una empresa consultada por este periódico. Reclamación que encuentra una respuesta taxativa: 'Si nadie corre con el riesgo es porque no se puede asumir', comentan desde la dirección de una aseguradora. La salida pasa por arriesgar o dejar de hacer la venta.

Una situación que afecta a cementeras, fabricantes de azulejos, de ladrillos y afines como los productores de electrodomésticos o muebles. Días atrás el presidente de la azulejera Keraben, Rafael Benavent, declaró a este periódico que 'coincide la crisis inmobiliaria con la falta de liquidez y, todo ello, se agrava por el recorte en la cobertura de los riesgos aplicado por las aseguradoras. Como consecuencia, el sector acusa una notable bajada de ventas y un importante incremento de la morosidad'.

Después de que la desconfianza haya tocado de lleno a las pymes, a finales de 2007, en la actualidad acecha a constructoras de cierto volumen asociadas a patronales como Anci o Aerco, según citan fuentes afectadas. Apenas se firman nuevas pólizas de riesgo sobre impagos y las que se renuevan conllevan condiciones económicas y técnicas más duras.

Las cifras que manejan las aseguradoras describen que el 40% de los impagos en 2008 proceden de la construcción. Sus previsiones pasan por afrontar este año indemnizaciones cercanas a los 1.000 millones (un 130% por encima de las primas esperadas) frente a los poco más de 300 millones de 2007.

Las suscriptoras de seguros dicen que no meten a todas las constructoras en el mismo saco, como asegura Coface -declara que de julio 2007 a julio de 2008 sus capitales asegurados en construcción han aumentado un 8,6%-, pero los datos hablan de un endurecimiento de las condiciones e incluso de retiradas de clasificaciones crediticias.

Crédito y Caución, con un 60% del mercado en España, reconoce que se ha visto obligada a adaptar la suscripción de riesgos al contexto y que los tipos de prima se están incrementando en el sector una media del 20%, en línea con los riesgos que plantea el nuevo entorno. Esta entidad, que ya avisó en marzo de 2006 de un parón en la construcción, ha potenciado su servicio de scoring predictivo, con el que avanza las insolvencias que pueden salir a la luz en 2009.

La citada Coface también ha tomado sus medidas. De momento ha rebajado la calificación de siete sectores entre los que figuran la construcción y la obra pública. La firma entiende que esa actividad está demasiado expuesta al encarecimiento de las materias primas y de la energía, a la burbuja de inversión especulativa y al endurecimiento de las condiciones del crédito.

Los datos que aporta Coface en España hablan de la evolución de un 20% de sus capitales asegurados a 30 de septiembre de este año. Pero en la misma fecha las declaraciones de facturas impagadas había aumentado un 80%.

A pesar de estos síntomas, las especialistas en avistar problemas defienden que seguirán asumiendo el máximo riesgo 'donde no detecten agravamientos del comportamiento en pagos por encima de los niveles que consideramos aceptables', sentencia Crédito y Caución.

Pólizas con franquicia

Una de las novedades que trae la creciente morosidad es la franquicia por siniestro. El otro fenómeno es una rebaja hasta de 25 puntos porcentuales de la cartera de crédito comercial que asumen las pólizas, según apunta la correduría de seguros Marsh.

Oportunidades para complementar la póliza

Lo que para unos se ha convertido en un problema, para otros se ha tornado oportunidad de negocio. La consultoría de riesgos y correduría de seguros Marsh está comercializando en España productos que vienen a complementar a las pólizas de crédito y que proceden de países como Reino Unido o Canadá.Tres de las que ganan adeptos son la póliza de doble capa, la simple risk y la discrecional con exceso de pérdidas. Bajo estas fórmulas se cubre la cartera que no aceptan las aseguradoras tradicionales, pero con altas primas. La tercera de estas fórmulas, por ejemplo, está diseñada para asumir la siniestralidad no esperada con el fin de que el cliente calcule los riesgos y cubra los cobros que cree seguros pero harían un agujero en su contabilidad en caso de una insolvencia. 'En plena crisis las empresas no se fijan tanto en el precio como en la eficacia de las coberturas', asegura Francisco Márquez, subdirector de crédito de Marsh.La suministradora de información financiera y comercial Axesor también se ha movido rápido. Hoy miércoles saca al mercado un nuevo servicio, bautizado como Informe Constructoras, que va a evaluar exclusivamente la solvencia de 40.000 firmas de la construcción. Su objetivo es determinar la capacidad que tiene un cliente para devolver la deuda, información que se complementa con comentarios de analistas.

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