Zapatero anuncia nuevas medidas para favorecer a las pymes
El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, ha anunciado hoy nuevas medidas para las pequeñas y medianas empresas española y ha apostado por una reforma a fondo del orden financiero mundial, porque, a su juicio, "no valen paños calientes".
Las primeras palabras de Zapatero durante la clausura hoy del XI Congreso Regional del PSOE de Canarias han sido para expresar su pesar por la muerte hoy de dos soldados españoles en un atentado en Afganistán.
Un cerrado y prolongado aplauso de los congresistas ha cerrado el homenaje que el jefe del Ejecutivo ha rendido a quienes velan "por la paz y la seguridad" en el mundo.
Después, ha elogiado a López Aguilar y ha destacado su valía para encabezar la lista que el PSOE presentará a las próximas elecciones europeas.
Pero la mayor parte de su intervención se ha centrado en los avatares económicos y financieros, ante los cuales ha anunciado -sin detallarlas- que el Gobierno adoptará nuevas medidas en favor de las pymes, mediante actuaciones que promuevan su capacidad de crédito y de financiación para contribuir a su actividad económica y al mantenimiento de sus empleos.
Y lo va a hacer convencido de que la sociedad, las empresas y los trabajadores españoles, así como sus representantes, "están a la altura de las circunstancias" y van a ser capaces de compartir el esfuerzo que hay que hacer para salir "cuando antes de la crisis".
Con una "plena confianza" en España y en sus capacidades, el también secretario general de los socialistas ha garantizado que la economía española se recuperará "antes de lo que algunos vaticinan".
Bajo el prisma de Zapatero, las respuestas necesarias para que España continúe su recuperación económica, su capacidad de crecimiento y de crear empleo, así como la extensión de las políticas de bienestar, dependen en gran medida de que el conjunto de la UE y de la comunidad internacional sean capaces de poner un nuevo rumbo para una economía más productiva, justa y solidaria.
A todo ello ha sumado la necesidad de recuperar los compromisos de los Objetivos del Milenio, favorecer los acuerdos comerciales para que los países más pobres tengan más posibilidades y luchar contra el cambio climático.
Precisamente "para que haya cambios reales" es por lo que, según ha resumido, ha trabajado en las últimas semanas esforzándose para que España esté presente en la "trascendental" cumbre del G-20 el próximo día 15 en Washington.
Tras desgranar gran parte de las medidas adoptadas por su Ejecutivo desde hace meses para ayudar a las familias más humildes, a los autónomos, a los desempleados o a los pensionistas, entre otros colectivos, ha afirmado que el Gobierno "no regateará esfuerzos ni determinación",
"No se dejará llevar por cantos de sirenas" de los que temen por el aumento del gasto social y público, ha sintetizado Zapatero, que ha argumentado que una sociedad cohesionada es más capaz de atender las situaciones adversas.
España, ha dicho el presidente, ha recorrido en 30 años de democracia el camino "al que otros tuvieron que dedicar más tiempo", razón por la cual está seguro de que el país "va a saber recuperar" su capacidad de crecimiento económico, de creación de empleo y de bienestar.
Más allá de estas consideraciones, ha juzgado prescindible "estar todos los días en la pelea partidaria" por este tema, porque es "muy conveniente" que se sumen todos los esfuerzos, a fin de ver los frutos "en un tiempo menor".
Sin mencionar expresamente al PP se ha dirigido a este partido para emplazar a sus dirigentes a decir "aunque sea en voz baja" que el sistema financiero español es uno de los más sólidos del mundo y que ha aguantado la crisis mientras caían algunos "colosos" mundiales.
Ha sido en este contexto donde ha puesto en valor los principios del PSOE, porque se trata de unos ideales que persiguen una sociedad más justa y solidaria, "y que no sólo se valore el ganar dinero fácil y el presumir de ello además".