El Gobierno vasco y el Banco de España fijarán la agenda en la fusión de BBK y Kutxa
El Banco de España y el Gobierno vasco marcarán la agenda de BBK y Kutxa. De los informes que envíen a Competencia se desprenderá la fecha de las asambleas que deberán celebrar ambas entidades para aprobar su integración.
El último trámite para la creación de la Caja de Ahorros y Monte de Piedad de Euskadi, entidad resultante de la fusión de BBK y Kutxa, depende del Banco de España y el Gobierno vasco. Ambas instituciones tienen que elevar un informe preceptivo a la Comisión Nacional de Competencia (CNC), organismo que deberá dar luz verde, vía silencio administrativo, a la integración de las dos cajas de ahorros vascas en un plazo no superior a un mes. Posteriormente, y si no se dan los supuestos establecidos en el control de concentraciones para solicitar más información del proceso, BBK y Kutxa podrán fijar la fecha de sus asambleas generales.
La idea con la que trabajan los gestores de ambas cajas, es que los cónclaves de representantes no se demoren más allá de la segunda quincena de diciembre. En teoría, la CNC recibió ayer el documento aprobado por los dos consejos de administración relativos a su fusión.
Inspector y regulador
El informe del Banco de España es preceptivo por su labor reguladora y de inspección. El del Gobierno vasco, a elaborar por el Departamento de Hacienda, viene dado por la facultad de inspección que tiene en algunas áreas. El Ejecutivo de Vitoria ya ha aplaudido en varias ocasiones la unión de BBK y Kutxa. También ha manifestado que hubiera sido mejor que Vital Kutxa participara en el proyecto de creación de una gran caja de ahorros en el País Vasco. Para facilitar esta estrategia de integración a tres, hubiera sido necesaria una reforma de la Ley Vasca de Cajas de Ahorros para adecuar proporcionalmente los órganos de representación en las asamblea.
El acuerdo de los consejos de administración, en el caso de la asamblea de BBK, superará el trámite sin problemas al contar con mayoría suficiente. En la de Kutxa, el asunto se presenta, de momento, algo más problemático ya que les falta un voto para que se apruebe la fusión.