La crisis frena el absentismo laboral
La crisis económica está reduciendo el absentismo laboral en algunos sectores económicos por temor a despidos, a formar parte de un expediente de regulación de empleo o a cualquier otra causa que pueda hacer perder un puesto de trabajo en unos momentos en los que tener empleo resulta muy valioso.
Así lo están constatando algunas patronales y empresas consultadas por Europa Press, que están empezando a apreciar que la situación económica y los ajustes de empleo que se están realizando en algunos sectores están llevando a los trabajadores a cuidar sus bajas y a ''escaquearse'' menos del trabajo.
Fuentes de la patronal de mutuas de accidente de trabajo y enfermedades profesionales AMAT confirmaron que en algunos sectores y empresas se está reduciendo el absentismo, si bien el gasto de las mutuas en el pago de prestaciones se está incrementando. Las razones de este mayor gasto pueden deberse al aumento que ha experimentado la población protegida por las mutuas o a que hay más procesos o a que la duración de los mismos es más larga.
El absentismo laboral tiene importantes costes para las empresas y también para la Seguridad Social y las mutuas. Durante los primeros quince días, la baja por incapacidad temporal (IT) derivada de una enfermedad común la abonan las empresas y a partir del decimosexto día el gasto recae sobre la Seguridad Social o sobre las mutuas, dependiendo de si la empresa tiene contratada o no a una mutua.
En realidad, las empresas sólo están obligadas a pagar la prestación por IT desde el cuarto hasta el decimoquinto día de la baja del trabajador, pero muchos convenios colectivos, cerca del 70%, establecen que la empresa pague la prestación desde el primer día hasta el decimoquinto y además de forma completa.