La confianza empresarial en Alemania retrocede a mínimos en dos años
La primera potencia exportadora del mundo y la locomotora europea pierde velocidad. Tras registrar un crecimiento negativo en el segundo trimestre del año (un 0,5% en tasa intertrimestral), la Comisión Europa predijo en sus últimas perspectivas que el crecimiento económico volvería a ser negativo en el tercer trimestre y que, por lo tanto, entraría en recesión a finales de año.
Las malas perspectivas han lastrado la confianza de las empresas, que ha caído al nivel más bajo desde mayo de 2005, según la encuesta mensual que realiza el Instituto de Investigación Económica alemán (IFO).
Este índice, que se calcula mediante cuestionarios sobre producción, inventarios, pedidos, precios y empleos a 7.000 empresas, retrocedió en septiembre hasta 92,9 puntos, frente a los 94,8 puntos registrados de agosto. Se trata de la cuarta caída mensual consecutiva y refleja el deterioro de la coyuntura internacional. 'El índice de confianza empresarial mantiene su tendencia bajista con pasos agigantados', según señaló ayer el presidente del Instituto IFO, Hans-Werner Sinn.
Las perspectivas empresariales para los seis próximos meses también han experimentado un leve empeoramiento y cayeron en septiembre a 86,5 puntos, frente a los 87 de agosto.
'Los últimos indicadores económicos contradicen cualquier idea sobre una posible recuperación de la eurozona', afirmó ayer Jacques Cailloux, economista jefe del Royal Bank of Scotland. 'Mientras que el Banco Central Europeo (BCE) siga ignorando las cifras de débil crecimiento en las grandes economías, no prevemos que se produzca una bajada de tipos, al menos a corto plazo', dijo.
El BCE augura una mejoría a finales de año
Michael Bonello, gobernador del Banco de Malta y miembro del Consejo de Gobierno del Banco Central Europeo (BCE), dejó ayer a las claras que en la mente de la institución no entra por ahora la posibilidad de una bajada de tipos. Bonello pronosticó en una entrevista que la eurozona probablemente se recuperará en el cuarto trimestre, sugiriendo que no ve necesidad de bajar los tipos de interés tras el empeoramiento de la contracción crediticia global. 'Sigo creyendo que para el cuarto trimestre habremos dejado atrás el punto más bajo, por lo menos haberlo pasado'', señaló.