De Madrid, su cielo
Cinco días en Madrid. Y 500 noches si se puede. Porque si durante el día es imposible aburrirse, la intensa vida nocturna de la capital es única en el mundo.
La Corte es ciudad de contrastes; presenta luz fuerte al lado de sombra oscura; vida refinada, casi europea, en el centro; vida africana, de aduar, en los suburbios', escribía Pío Baroja en La busca. Y una ciudad de grandes contrastes es la que recibe al visitante más de un siglo después de la cita. Madrid es, ante todo, acogedora con el forastero, porque en esta gran ciudad de casi seis millones de habitantes (3.132.463 habitantes dentro de su municipio y 5.843.031 en su área metropolitana) casi nadie ha nacido aquí y casi todos hemos venido a refugiarnos. A Madrid se la ama en la distancia y se la odia en el infernal atasco matutino.
Si el viajero llega por avión, podrá admirar (y padecer, claro) la espectacular Terminal 4 del aeropuerto de Barajas, proyectada por los arquitectos Antonio Lamela y Richard Rogers (Premio Pritzker 2007, considerado el Nobel de la arquitectura). El uso de colores en las columnas que sostienen el impresionante techo ondulado le servirán para identificar las diferentes zonas de la terminal. Aunque nunca ha dejado de ser un poco provinciana -se la cita ceremoniosamente como 'la villa de Madrid'-, la ciudad compite en vanguardismo arquitectónico con otras grandes capitales europeas. Ya en marcha desde el aeropuerto hacia el centro, el viajero se encontrará con un sorprendente skyline: el de los nuevos rascacielos del Paseo de la Castellana, los más altos de Madrid y de España. Impresionantes estas cuatro torres; la más alta, de 250 metros, de Torre Caja Madrid, diseñada por Norman Foster, responsable también de una planta del Hotel Silken Puerta de América.
Este moderno hotel (situado en la entrada de la ciudad, desde el aeropuerto) está firmado por 19 arquitectos. Se puede elegir una habitación diseñada por Zaha Hadid, Mariscal o Victorio & Lucchino, entre otros. La fachada, ilustrada con el poema Libertad de Paul Eluard, la firma J. Nouvel. Su restaurante Lágrimas Negras y el bar del ático, Skynight, son referencia obligada del Madrid más moderno.
El viajero ya ha llegado. Va a pasar cinco días en la Villa y Corte. Y tenemos un plan para él en cada uno de esos cinco días. Es éste:
1. Miércoles: Callejear
Estamos en el centro, en la Puerta del Sol, en el punto exacto donde arrancan todas las carreteras nacionales. Es el momento de tomar contacto con el cielo de la ciudad. El azul intenso recorta la torre del reloj de la Casa de Correos, el reloj que cada 31 de diciembre nos invita a tomar las 12 uvas para celebrar la entrada del año nuevo. El cielo, si la contaminación no lo impide, es siempre un espectáculo en sí mismo. Inspirador de los grandes pintores, se le rindió un homenaje cuando con motivo de la boda de los Príncipes de Asturias se cubrieron todos los edificios en obras con gigantescas lonas de reproducciones de los cielos madrileños pintados por Goya, Velázquez o Antonio López.
A pocos minutos de paseo está todo el viejo Madrid: la Plaza Mayor, Lavapiés, el Barrio de las Letras, donde nacieron o vivieron los autores más importantes del Siglo de Oro de la literatura castellana: Lope de Vega, Quevedo, Góngora... Cervantes habitó en el número 18 de la calle Huertas, situada en las cercanías del Congreso de los Diputados y de los tres grandes museos de Madrid: Prado, Reina Sofía y Thyssen-Bornemisza. Una de las concentraciones de arte más importantes del mundo.
Desde la Plaza de Cibeles, en la que se encuentran lugares emblemáticos como el Banco de España y el Palacio de Comunicaciones, actual sede del Ayuntamiento de Madrid, se alcanza la Plaza de la Independencia, en la que se encuentra la famosa Puerta de Alcalá.
2. Jueves: Tiendas y copas
En Madrid hay de todo, desde las tiendas más lujosas del barrio de Salamanca, a la ropa más alternativa de la calle Fuencarral. Es la suma de todas las tendencias: es un mezcla variopinta y viva. La Gran Vía y alrededores es la zona más concurrida y variada en tiendas y grandes almacenes, como El Corte Inglés.
Cansados de tantas compras qué mejor que parar en una terraza a tomar algo y preparar las copas de la noche. En el Paseo de la Castellana, sobre todo entre Cuzco y el Paseo del Prado, hay algunas muy agradables. O en Pintor Rosales y el Paseo de Camoens, muy populares entre la gente joven. Y cualquier terraza de la Gran Vía es un mirador privilegiado donde disfrutar de un desfile de personajes que parecen sacados de una película de Almodóvar.
Si el viajero pregunta a cualquier madrileño, le dirá que el encanto de Madrid sale de noche. ¡Viva la vida loca! Santa Ana y Huertas, Alonso Martínez y Bilbao; hay gran cantidad de bares de tapas, cervecerías, pubs y cafeterías de gran animación.
3. Viernes: Parques y Jardines
Madrid cuenta con extraordinarios jardines históricos, como el Real Jardín Botánico, el de Sabatini, el Capricho de la Alameda de Osuna y el parque del Buen Retiro, en el centro, probablemente sean los más bonitos de la ciudad.
El Retiro cuenta en su interior con numerosos monumentos y lugares de interés, como son el Palacio de Cristal, la Puerta de España, desde la calle Alfonso XII, la rosaleda, el estanque y gran cantidad de fuentes.
Además, está la Casa de Campo, ubicada en el distrito de Moncloa-Aravaca; El Parque del Oeste (desde el que, probablemente, se vean las mejores puestas de sol de todo el centro de España, en la zona del Templo de Debod). El Parque Juan Carlos I es uno de los mayores de la ciudad. Alberga el recinto ferial Ifema, donde se celebran algunas de las exposiciones anuales más importantes de Europa: Simo, Arco, Fitur... Además, destaca el llamado Jardín de las Tres Culturas, que contiene tres zonas ajardinadas que representan a las culturas cristiana, judía y musulmana.
4. Sábado: Museos
Hay museos para todos y de casi todo, pero los que no hay que perderse son el Museo del Prado, el Thyssen-Bornemisza y el Reina Sofía, tan cercanos uno de otro que juntos constituyen, con una cuarta pata en la misma zona (el recién abierto CaixaForum, un gran centro cultural), probablemente el rincón del arte más importante del mundo.
El Prado es una de las más importantes pinacotecas mundiales, la más rica por la acumulación de obras maestras. Su colección se centra en pintura anterior al siglo XX, especialmente italiana, española y flamenca. Algunas de las obras más representativas que contiene son Las Meninas, de Velázquez; La maja desnuda, de Goya; Las tres Gracias, de Rubens; el Autorretrato, de Durero; el Caballero de la mano en el pecho, de El Greco; El Jardín de las Delicias, de El Bosco...
El Museo Thyssen-Bornemisza es una de las mayores colecciones privadas de arte del mundo, que comienza en el Renacimiento y concluye en el siglo XX. El Reina Sofía es el museo nacional español de arte del siglo XX. Cuenta con colecciones de Pablo Picasso y Salvador Dalí. Y si el viajero tiene más tiempo, el Museo Romántico, el Lázaro Galdeano, el Sorolla...
5. Domingo: Rastro y tapas
'Todo se vende y se compra' en este gran mercado en plena calle, mezcla de modernidad y casticismo en torno a la plaza de Cascorro. De origen medieval, el Rastro es uno de los mercados más antiguos de Europa, y también uno de los más actuales.
Recorrer sus calles, confundirse entre el gentío, regatear todos los precios y disfrutar del ambiente es toda una experiencia. Y después, tomar el aperitivo en alguna de las tabernas de la zona. Será una mañana de domingo completa.
Se podría decir que la costumbre de comer de tapas equivale a un fast-food español que se puede practicar en todos los bares de Madrid. Las tabernas más típicas están situadas en la zona más antigua, Cava Baja, Cava Alta, Cava de San Miguel, Puerta del Sol o Latina; y también de postín, como Lhardy, una institución en la gastronomía madrileña. En su barra, las especialidades son las tazas de caldo y los hojaldritos. En su restaurante, el cocido madrileño y los callos. Taberna de la Dolores; Taberna de los Cien Vinos y El Alabardero, en el Madrid de los Austrias; Miau, uno de los locales más actuales de la Plaza Santa Ana, y Casa Labra, cerca de la Puerta del Sol son otras opciones. Y cómo no, acabar la visita contemplando una puesta de sol en el Templo de Debod.
Guía práctica
Cuándo visitar Madrid. Es importante tener en cuenta que los inviernos son fríos, con temperaturas inferiores a los 6°C, heladas nocturnas y nevadas ocasionales, y casi sin transición, se derrite el asfalto en verano, con medias en torno a los 24°C en julio y agosto y con máximas que a veces superan los 35°C.Puntos de información. La nueva terminal del aeropuerto de Barajas, las plazas de Cibeles, Callao, Atocha, Mayor y Colón son los lugares que tienen puntos y oficinas de información turística. También hay un servicio de Atención (Sate) en la Comisaría de Leganitos, 19. Teléfono de denuncias 24 horas: 902 102 112. Horario: 9.30-22 h (todos los días) webs de interésWebs de interésTurismo. Portal de promoción de la ciudad, con información turística, de ocio, de cultura y de negocios. www.esmadrid.comFútbol. www.clubatleticodemadrid.com. www.realmadrid.comToros. www.las-ventas.comMapas . De la ciudad, maps.google.es. Del Metro, planos, tarifas y horarios, www.metromadrid.es.Flamenco. Flamenco de noche. Cantaores, bailaoras y guitarristas flamencos, www.corraldelamoreria.com www.spanish-fiestas.com/madrid/flamenco.htm