Los gestores albergan mejores previsiones en tipos de interés
Los mercados parecen manejar ya a estas alturas del año algunas esperanzas de anticipación de la política monetaria en versión más suave. Los últimos datos macro parecen anticipar señales abundantes en esta dirección, no sólo porque la que está al borde de la recesión sea la economía europea y no la estadounidense, como se ha venido diagnosticando erróneamente en los últimos meses (este semana han aparecido las evidencias de que se trataba ciertamente de un error, al ver el PIB americano subir un 3,3%), sino porque el declive de los precios del petróleo ha ido facilitando una senda más moderada para las subidas de precios hasta el punto de permitir el desmantelamiento de algunas de las cautelas preparadas por las autoridades monetarias `para evitar que la inflación se les fuera de las manos. Los últimos argumentos dados a conocer por los diversos portavoces del BCE tienen otro estilo, lejos de la dureza amenazante hasta el verano.
En este entorno, los tipos de interés a largo plazo están anticipando bajadas de tipos oficiales y como consecuencia de ello los planes de pensiones de renta fija a medio y largo plazo han acumulado ganancias, escasas, durante las últimas semanas. Al ser el único escenario en el que se pueden obtener ganancias, descartada la renta variable, es interesante tener en cuenta su evolución
En la renta variable, las pérdidas se han tomado una pausa en agosto, entre otras cosas porque los indicadores apuntan hacia un entorno más permisivo con la inversión, si bien los resultados empresariales no parecen en condiciones de ofrecer una tabla de salvación. El mes de agosto ha finalizado con mejores sensaciones de las que frecuentó durante la mayor parte del mes. El ligero descenso de los índices a lo largo de este mes no oculta que las economías se adentran en el mes de septiembre con unas perspectivas peores en Europa pero mucho mejores en EE UU, que al fin y al cabo es la economía que puede tirar de la actividad hacia arriba a nivel global.