Venezuela y Cemex se dan un mes para llegar a un acuerdo
El Gobierno de Venezuela y la cementera mexicana Cemex están cada vez más cerca de un acuerdo sobre la nacionalización de las plantas de la compañía a cargo del Gobierno de Hugo Chávez. Ambas partes definirán el precio de las instalaciones en un plazo que finaliza el próximo 28 de septiembre, según ha revelado el propio Chávez en la cadena de televisión pública.
El mandatario apunta que se ha firmado un 'pacto para ejecutar la entrega del control y de las operaciones de Cemex-Venezuela'. Con este paso quedan aparcadas las diferencias entre Gobierno y multinacional, que llevaron a la primera a iniciar un procedimiento de expropiación y a la segunda a amenazar con una demanda de arbitraje internacional.
Hasta que las posiciones se encuentren en una tasación de los activos de Cemex, una comisión de transición se hará cargo de la gestión de las fábricas.
En caso de que el plazo venciera sin resultados, Gobierno y compañía se reservan la posibilidad de volver a reclamar, pero Chávez ya adelanta que las plantas de cemento terminarán en manos públicas.
Antes de emprender los contactos, Venezuela estaba dispuesta a pagar 650 millones de dólares por tres fábricas, mientras la multinacional mexicana valoraba sus activos en 1.300 millones de dólares. De momento, no han trascendido noticias en torno a un nuevo precio.
Las conversaciones se enmarcan en un proceso de nacionalizaciones en el sector cementero, entre otros, por el que el país se ha hecho ya con las instalaciones de la suiza Holcim y de la francesa Lafarge. Ambos gigantes europeos del polvo gris llegaron a un entendimiento económico con el Ejecutivo de Chávez.