Las ventas minoristas en Reino Unido crecieron en julio, mejorando las previsiones
Las ventas al por menor en el Reino Unido crecieron de forma inesperada en julio, un mes en el que los consumidores se decantaron por las tiendas de descuentos y los teléfonos móviles y huyeron de los grandes centros comerciales.
Las ventas al por menor crecieron entre junio y julio el 0,8% y modificaron la tendencia bajista iniciada el mes anterior, cuando cayeron un 4,3%-la mayor bajada desde que comenzaron los registros en 1986-, según la cifra revisada anunciada hoy.
Pese a la subida mensual, que sorprendió al mercado, la cifra interanual de julio es la más baja desde febrero de 2006.
La mayor aportación al crecimiento intermensual de julio provino de las ventas de ropa y zapatos, que subieron un 1,5%, y de las de la categoría "otras tiendas", que se incrementaron un 2,8%.
Por su parte, las ventas de alimentos aumentaron el 0,3% y las de productos para el hogar, el 1,6%. El inesperado crecimiento de las ventas minoristas en julio incrementa la incertidumbre sobre la política monetaria que llevará a cabo el Banco de Inglaterra a partir de ahora.
El banco central ha centrado su atención en los últimos meses en la inflación, por lo que ha optado por mantener alto el precio del dinero a pesar de la ralentización económica experimentada, que podría llevar incluso a una recesión. Según el gobernador del Banco de Inglaterra, Mervyn King, la economía se enfrenta a "un ajuste difícil y doloroso" debido a la caída de los precios de la vivienda y al aumento de la inflación.