Industria impide la división de grandes plantas fotovoltaicas
El borrador del nuevo real decreto fotovoltaico resuelve una de las dudas que aún tenía la industria sobre su futuro. El texto no permite trocear los parques grandes en instalaciones pequeñas. Desaparecen así los huertos solares, tal y como se conocen hasta ahora.
Hasta ahora, dividir era más rentable para la inversión en energía solar fotovoltaica. Una planta grande se partía en pequeñas instalaciones de 100 kW, que recibían una prima mejor que las mayores. Así, nació la figura de los huertos solares. Mediante este mecanismo, han entrado a invertir en esta energía renovable múltiples pequeños inversores, bancos o empresas no relacionadas con este sector y los grandes parques solares aumentaban su rentabilidad. Hasta tal punto que nadie sabe cuantas plantas solares hay realmente en España porque, aunque las cuentas de la Comisión Nacional de la Energía hablan de más de 21.000 instalaciones, cada planta grande alberga un buen número de ellas.
El texto del borrador de nuevo Real Decreto de retribución a la energía solar fotovoltaica, al que ha tenido acceso CincoDías, pone fin a esta figura y cierra la posibilidad de esconder bajo varias plantas de 10 MW una megainstalación de 70 MW. Los parques quedan limitados y unificados definitivamente a 10 MW en suelo y 2 MW, en techo.
El huerto solar ha sido eliminado, de hecho, de dos modos. Tal y como explican fuentes del sector, 'desde el momento en que el decreto establece una única prima para las instalaciones de suelo, ya no merece la pena dividir en grupos de 100 kW'. Y para eliminar la parcelación de una única instalación, el decreto considera 'que pertenecen a una única instalación o a un sólo proyecto, según corresponda, las instalaciones y proyectos que se encuentren en la misma referencia catastral. Del mismo modo, se considerarán una sola instalación aquellas que se conecten en un mismo punto de red de distribución o transporte o dispongan de una línea de evacuación común'.
Pequeño inversor
Pero los pequeños inversores no quedan radicalmente fuera de la energía solar fotovoltaica con este sistema. Muy al contrario, podrán seguir participando de sus beneficios pero a través de sociedades conjuntas. Es decir, en lugar de muchas plantas en una, cada una de un propietario, una instalación podrá tener muchos propietarios que dividan la retribución entre ellos.
La norma explica la razón última de este impedimento: 'con las limitaciones anteriores se trata de impedir la implantación de instalaciones de un tamaño excesivo'. 'Del mismo modo, se trata de evitar el efecto acaparamiento de proyectos demasiado grandes que podrían copar un porcentaje importante de la potencia de una convocatoria', agrega la norma. Si la ley establece un máximo de potencia instalada de 100 MW para plantas en suelo en 2009 , un promotor que quisiera instalar un parque de 70 MW dividido en siete estaría comprometiendo las posibilidades del resto de sus competidores para el año.
En este sentido, la opinión de las patronales es favorable a esta limitación para evitar la excesiva concentración sectorial que acarrearía. El punto fundamental de oposición está en la limitación de la potencia a instalar en 2009.
TRAMITACIâN
El texto del borrador del Real Decreto llegó el jueves pasado a la Comisión Nacional de la Energía (CNE) para su informe preceptivo 'en el plazo establecido para el procedimiento de tramitación de urgencia', afirma la carta que acompañaba a la propuesta. Por el procedimiento de urgencia, el plazo para presentar las alegaciones ante la CNE se reduciría de un mes a cinco días y se remitiría después al Consejo de Estado para su dictamen.
TARIFA La potencia instalada marcará el ritmo de reducción
La propuesta de Real Decreto prevé 'un mecanismo de revisión de las tarifas en función del ritmo de potencia' que se inscriba en el registro, figura que regulará la cantidad de potencia que entra en el mercado. Las primas parten de una retribución de 29 euros por MW para las instalaciones de suelo, un 35% inferior a la actual, y 33 euros por MW para las instalaciones en edificios, un 27% menor.El mecanismo previsto supone que, si se cubre la potencia máxima anual prevista para 2009, los 300 MW, se aumentará el cupo permitido en un 10% y se reducirá la tarifa en el mismo porcentaje. El texto afirma que, de cubrirse toda la potencia de aquí a 2020, la tarifa para entonces rondaría los 9-10 euros por MW, dependiendo del tipo de instalación. Si no se cubre y sólo se reduce la prima en un porcentaje del 2,5%, la tarifa rondaría los 20-23 euros por MW.Esta propuesta 'supondrá un incremento adicional del 0,5% en la tarifa eléctrica'.
REGISTRO Tres meses más de incertidumbre industrial
El texto del borrador para la energía fotovoltaica establece la creación de un registro que servirá para autorizar y controlar la potencia que se instala trimestralmente en España y evitar que se dispare, lejos del objetivo marcado de 300 MW al año en 2009. De este modo, el registro podrá autorizar proyectos con una potencia total de 75 MW trimestrales. Sin inscripción en el registro, no hay prima.El problema es que la primera convocatoria para autorizar potencia se abre el 1 de noviembre hasta el 31 de enero de 2009 pero no se hace pública la preasignación de la retribución de este periodo, que significaría asegurar que la instalación entra dentro de la convocatoria y recibirá prima, hasta el 16 de marzo. Supone un nuevo y fuerte parón para la industria puesto que nadie va a encargar placas hasta que no sepa si su proyecto está autorizado o no. ASIF cifra en 6.000 millones las inversiones que no se realizarán por el parón desde septiembre a marzo.