Pekín vivirá los juegos más tecnológicos

Cuando el 8 de agosto comiencen en Pekín los Juegos Olímpicos de la XXIX Olimpiada de la era moderna, se pondrá en marcha el mayor despliegue tecnológico de la historia en torno a un gran acontecimiento deportivo: una red de datos totalmente redundante, 10.000 ordenadores personales, 1.000 servidores, 4.000 impresoras, 1.000 mecanismos de seguridad y red, y 5.000 terminales del sistema de resultados, de los que 2.500 están destinados a los comentaristas y otros 2.500 permiten el acceso a la intranet de la organización.

Y todo bajo un equipo de 4.000 especialistas en tecnologías de la información (incluidos 1.000 voluntarios) desplegados en 70 instalaciones, que antes del arranque del evento ya habrán hecho más de 200.000 horas de pruebas.

Patrick Adiba, vicepresidente ejecutivo de Grandes Eventos y Juegos Olímpicos de Atos Origin, compañía encargada de diseñar, construir y operar la infraestructura tecnológica de los Juegos, explica que la edición de Pekín es más complicada que la anterior de Atenas puesto que en la capital griega todas la competiciones se hicieron en una zona donde la distancia máxima era de 72 kilómetros. 'En estos Juegos hay competiciones como las de vela en Qingdao o la equitación en Hong Kong, que están a varios cientos de kilómetros de Pekín', señala el directivo en una entrevista con CincoDías. El proyecto incluye dos sistemas tecnológicos. El primero dedicado a la gestión de los propios Juegos (acreditación, transporte, participaciones, clasificaciones, informes médicos, llegadas, salidas y protocolos), y el segundo destinado a los sistemas de difusión de la información.

'Entre otras operaciones, hay que expedir 200.000 acreditaciones entre deportistas, entrenadores o directivos, y tenemos que suministrar información a los 21.600 periodistas acreditados', dice Adiba, que recuerda que en los Juegos de Invierno de Salt Lake City la velocidad de publicación de los resultados de las pruebas fue de 0,3 segundos. En esta edición, la información se dará en inglés, en francés (en recuerdo del creador de los JJ OO modernos, Pierre de Coubertin) y chino, idioma del país organizador.

Adiba, que recuerda que su empresa ha sido el integrador de la tecnología en los Juegos de Atenas y Turín (y lo será también de las ediciones de Vancouver y Londres), afirma que la implantación del sistema tecnológico comenzó hace cuatro años. 'Empezamos antes de que acabaran los Juegos de Atenas', bromea el directivo que recuerda que Atos dirige un equipo compuesto por nueve proveedores principales. Entre ellos figuran Omega, encargada de los sistemas y servidores de cronometraje y clasificaciones así como de los marcadores y sistemas de resultados; Kodak, responsable de los sistemas de imagen y fotografía; Lenovo, suministrador de hardware y servidores; Panasonic, fabricante de los equipos de audio, televisión y vídeo; Samsung, proveedor de los equipos de comunicación inalámbrica; China Netcom, operadora de telefonía fija; China Mobile, de las comunicaciones móviles y Sohu.com, principal proveedor de internet.

Precisamente, una de las novedades tecnológicas de esta edición es la implantación de un servicio de información inalámbrico, al que los periodistas podrán acceder desde un portátil.

En Atos Origin no se atreven a hablar de cifras globales, si bien, otras fuentes del sector explican que la implantación y el desarrollo tecnológico va a suponer en su conjunto una inversión de 300 millones de dólares (unos 193 millones de euros). Una apuesta por un periodo de poco más de dos semanas pero en la que no puede haber fallos. Sin duda, es un examen para la tecnología ante 4.000 millones de televidentes de todo el mundo.

LAS CIFRAS

10.000 PC se han instalado en la red de los Juegos, la mayoría de Lenovo

1.000 servidores se incluyen en la infraestructura tecnológica para el evento

300 millones de dólares se han invertido en el despliegue de tecnologías de la información

Creación de barreras de seguridad

Una de las áreas donde más ha insistido Atos Origin es en la seguridad informática, que ganó relevancia tras los atentados del 11 de septiembre, según explica Patrick Adiba. El directivo tiene claro que un ciberataque en los días del evento puede causar daños gravísimos. 'Imagina que alguien entra en el sistema y cambia los resultados', dice.Atos Origin ha creado una infraestructura de seguridad de tecnologías de la información en la que se ha separado la red de los Juegos de internet, se ha segmentado la red en dominios de seguridad además de colocarse sistemas de detección de intrusos.