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Política

Zapatero considera garantizada la paz social a lo largo de toda la legislatura

La renuncia expresa a reformar el mercado laboral si no existe un acuerdo previo con sindicatos y empresarios es considerada por el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, como una 'garantía' para el mantenimiento de la paz social a lo largo de toda la legislatura, al margen de 'los conflictos puntuales' que pudieran surgir como consecuencia del deterioro económico o la destrucción de empleo. Así lo afirmó ayer durante un somero balance del 37º Congreso del PSOE celebrado el fin de semana.

Poco después de finalizar la primera reunión con la nueva Ejecutiva federal elegida en el 37 congreso, Zapatero compareció exultante en la sede federal de la madrileña calle Ferraz al lado de su núcleo duro: el vicesecretario general, José Blanco, la secretaria de Organización, Leire Pajín, y el portavoz parlamentario, José Antonio Alonso. El presidente opinó que el cónclave socialista había sido 'un éxito' y negó que en el mismo se hubiera soslayado el debate sobre la compleja situación económica, que todavía rehúye calificar de crisis. De alguna forma, la presencia en la clausura del congreso del presidente de CEOE, Gerardo Díaz Ferrán, y de los máximos responsables de UGT y CC OO, Cándido Méndez y José María Fidalgo, le facilitó a Zapatero un cierto aval de credibilidad a sus argumentos económicos.

El presidente sostuvo ayer que mantiene una 'muy buena relación' con los agentes sociales pero que, más allá de esta atmósfera tan positiva de entendimiento con ellos, lo que realmente cuentan son las políticas que piensa desarrollar el Gobierno a la hora de garantizar una paz social que confía en poder mantener durante toda la legislatura. 'Mi pronóstico es que se va a mantener este buen clima a lo largo de la legislatura, más allá de que puedan existir conflictos puntuales', señaló. 'Es la política social y laboral del Gobierno lo que garantiza ese clima de paz social, básicamente por nuestro compromiso de defender los derechos de los trabajadores y de no acometer reformas fundamentales en esos ámbitos sin contar con el acuerdo de los sindicatos y empresarios', agregó. A su juicio, esta forma de actuar 'es lo que da tranquilidad a los agentes sociales y también a los inversores, pues lo que genera conflictividad es atacar los derechos de los trabajadores, y eso es lo que no va a hacer este Gobierno', sentenció.

El presidente del Ejecutivo expresó también su compromiso de sacar adelante todas las iniciativas aprobadas en las resoluciones del 37 congreso en el plano político, algunas de las cuales ni siquiera figuraban en el programa electoral con el que el PSOE concurrió a las pasadas elecciones generales. Entre otras propuestas figuran la reforma de la ley del aborto y la ampliación del derecho de voto de los inmigrantes. 'Vamos a cumplir las resoluciones del congreso y lo haremos pronto', previo diálogo con las fuerzas políticas, aseguró Zapatero.

El Gobierno sacará adelante todas las resoluciones aprobadas en el 37º Congreso Federal

El presidente informó de que el pasado sábado mantuvo una reunión con el presidente de la Generalitat de Cataluña, José Montilla, con quien abordó, además de la composición de la nueva Ejecutiva socialista, la negociación pendiente de la financiación autonómica y el desarrollo del Estatuto de autonomía.

En la nueva Ejecutiva se sientan como representantes del PSC la ministra de Defensa, Carme Chacón y el viceprimer secretario del partido, Miguel Iceta.

Respaldo a la directiva europea sobre inmigrantes

La directiva europea que regula la estancia de inmigrantes indocumentados en los países de la UE supondrá 'un avance' en la mejora de sus condiciones en muchos países pero no las empeorará en ninguno, tampoco en España, aseguró ayer José Luis Rodríguez Zapatero, quien expresó sus reservas a las críticas que desde algunos sectores se han hecho a la directiva adoptada por el Parlamento Europeo.En opinión del presidente, esta directiva supondrá la mejora de las condiciones de los inmigrantes en muchos países de larga tradición democrática, como Holanda o Gran Bretaña, pero que tienen una legislación en materia de inmigración 'mucho menos garantista y con muchas menos posibilidades jurídicas'.Zapatero mantuvo que la legislación española sobre inmigración es 'seguramente la más respetuosa de toda Europa'.

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