Los asesores fiscales piden compensar pérdidas con beneficios pasados
Aunque la reforma del impuesto de sociedades entra plenamente en vigor este año, el Registro de Economistas y Asesores Fiscales (REAF) propone un nueva modificación del tributo, ya que 'ha quedado incompleta' y necesita 'retoques' ante la nueva coyuntura.
Los fiscalistas creen que los necesarios ajustes en la aplicación del Plan General Contable están incrementando la carga tributaria de las empresas, pese a la ampliación en dos semanas del pago fraccionado acordado por el Gobierno para mejorar la neutralidad fiscal del plan.
La más novedosa de las propuestas de los asesores fiscales, presentadas ayer, consiste en que las empresas puedan compensar las pérdidas en el ejercicio a partir de los pagos del impuesto en años pasados en los que tenían beneficios, y aportar así la liquidez necesaria para acometer nuevos proyectos de inversión.
Esta medida, denominada carry back y vigente en otros países de la Unión Europea, como Holanda, Reino Unido o Alemania, tendría carácter coyuntural y se limitaría a entre los 2 y 3 años anteriores al ejercicio de pérdidas.
Además, proponen diferir la cuota a pagar resultante de determinados ajustes por la aplicación del plan contable durante los próximos cinco años, minimizar las obligaciones de documentación en operaciones para empresas de reducida dimensión, así como mantener las deducciones por I+D+i para conservar el un régimen de incentivos atractivo.
Este tributo es el tercero en importancia recaudatoria (39.418 millones de euros en 2006 y un 17,9% del total de los impuestos). Pero la desaceleración junto con la restricción del crédito, ha mermado la actividad de las empresas por lo que las compañías necesitarían reducir sus obligaciones con el fisco, según REAF, para poder mantener su actividad inversora. Prueba de ello es que la recaudación hasta mayo ha caído un 19,7%.
Una mayor rebaja
REAF considera que la rebaja de tipos en el impuesto de sociedades aprobada en 2006, del 35% al 30% en el tipo general, se ha quedado corta y debería recortarse aún más, 'en la medida que la situación lo permita', para acercarlo a otros países de la UE.