Menos cine y más música en la Gran Vía madrileña
Caja Madrid consagrará el Palacio de la Música a las artes escénicas
En el otoño de 1926 abría sus puertas en la Gran Vía madrileña el cine Sage, que a partir de 1928 sería conocido como Palacio de la Música. Su arquitecto, Secundino Zuazo, lo concibió como un edificio multifuncional, con sala de cine y conciertos -por allí pasaron la Orquesta Sinfónica de Madrid, la Orquesta Nacional o la Orquesta de RTVE, que durante un tiempo tuvo allí su sede. Ochenta años después, la Fundación Caja Madrid le devolverá el espíritu original, consagrándolo a la música y las artes escénicas.
La Fundación Caja Madrid sale al rescate del histórico edificio, con un proyecto musical y escénico. La operación de compra venta se cerrará en los próximos días e implicará su remodelación -en el exterior destaca su fachada de concepción claramente clasicista y en el interior su decoración barroca, inspirada en el Hospital de la Caridad de Sevilla-.
Los propietarios del cine, la empresa Filmofono, han justificado la venta en la escasa rentabilidad del negocio. La primera opción, fue su transformación en un centro comercial, pero la Comisión de Urbanismo del Ayuntamiento de Madrid no admitió a trámite el Plan Especial para el cambio de uso en su actividad.
La zona de Gran Vía y Alcalá ha perdido más de 15 salas de cine
Hay que destacar que el Palacio de la Música se ubica en el principal eje comercial de Madrid, donde la vecina calle Preciados marca la referencia, con un precio de 52.000 euros el metro cuadrado, según el Informe de Locales Comerciales 2008 de Knight Frank.
El del Palacio de la Música, uno de los cines más grandes de Europa, es el último cierre en la principal arteria del espectáculo de la capital, conocida hace unos años como el Broadway madrileño. Antes siguieron el mismo destino las salas Pompeya, Imperial, Rex, o Azul, con desigual destino. En total, en la zona de Gran Vía y Alcalá se han perdido más de 15 salas de cine.
La Asociación Nacional de Amigos de los Teatros de España (Amite) ha lamentado el cierre del cine Palacio de Música y ha expresado su temor a que con el tiempo, a la desaparición de otras salas monumentales como el Callao, Capitol, o el Palacio de la Prensa, y en su día, si los musicales entran en crisis, cerrar las dedicadas a este género, como son el felizmente recuperado Rialto, el Lope de Vega o el Coliseum.
En 1926, el Madrid inmerso en grandes proyectos para convertirse en una gran ciudad estrenaba un espacio para el séptimo arte, la primera película que se proyectó fue La venus americana; en el futuro, ganará un espacio para la música -la programación de conciertos se concentra el Auditorio Nacional y de vez en cuando en el Teatro de la Zarzuela-.
La operación es una nueva apuesta de Caja Madrid por la cultura. A finales de 2002, la entidad financiera celebró su tercer centenario con la inauguración de La Casa Encendida, un centro cultural de 6.500 metros cuadrados, con salas de exposición, biblioteca, auditorio, sala de proyecciones y aulas de formación. La entidad invirtió 1.200 millones de pesetas (7,2 millones de euros) en la transformación del edificio de estilo neomudéjar que en 1913 acogía el Monte de Piedad y Caja de Ahorros de Madrid en un centro experimental abierto al panorama más vanguardista y a las propuestas más transgresoras y originales de los jóvenes.
Proyecto emblemático de Secundino Zuazo
Situado en el segundo tramo de la Gran Vía, el Palacio de la Música fue construido entre 1924 y 1926 por encargo de la SAGE (Sociedad Anónima General de Espectáculos). La idea de Secundino Zuazo, arquitecto también de La casa de las Flores y los Nuevos Ministerios, era crear un edificio multifuncional, en el que tuvieran cabida una sala de cine y conciertos, una sala de fiestas bajo el patio de butacas, y un cine de verano al aire libre en la azotea.El hundimiento de la cubierta y la fachada que daba a la calle Abada obligó a Zuazo a modificar el proyecto original aligerando el peso y teniendo que renunciar al cine de la azotea. Fue inaugurado con el nombre de Cine Sage el 13 de noviembre de 1926 con un concierto dirigido por el maestro Lasalle y al día siguiente se proyectó la primera película, La venus americana.Desde 1928 se le conoce por su nombre de Palacio de la Música. Su aforo, de unas 2.000 butacas, lo convierte en uno de los cines más grandes de Europa.El 22 de noviembre de 1932 sufrió un incendio que destruyó un podio para orquesta cubierto por un ábside.En 1983 el arquitecto Enrique López Izquierdo realizó una reforma para convertirlo en multicines, construyendo dos nuevas salas aprovechando los bajos en donde había estado la sala de fiestas.