Crédit Agricole ampliará capital 5.900 millones para cubrir pérdidas
No es un buen momento para Crédit Agricole. El grupo francés ultima una ampliación de capital de 5.900 millones de euros para hacer frente a las pérdidas y a la crisis de los mercados. El anuncio de esta inyección de capital se produce 18 días antes de que finalice el plazo dado por el Banco de España para llegar al 29,9% del capital de Bankinter.
El banco francés Crédit Agricole no renuncia a completar la compra del 29,9% del capital de Bankinter pese a la delicada situación del grupo galo derivada de la crisis financiera internacional. Sus responsables se tomarán tiempo para realizar esta adquisición. 'No tienen prisa', aseguran fuentes cercanas a la entidad gala. La institución francesa controla el 20,1% del grupo español y tienen autorización del Banco de España para subirla a casi el 30% hasta el 31 de mayo.
Pero Crédit Agricole no tiene intención de llegar a este porcentaje por el momento. Su proyecto es dilatar lo más posible esta inversión, para lo que negocia con el gabinete de abogados de Garrigues -su asesor jurídico en esta operación-, si pedir al supervisor español una ampliación del plazo para completar esta participación; o por el contrario dejarla agotar y esperar a solicitarla cuando considere que es el momento de adquirir el 10% que le resta ahora. El consejo de Garrigues es solicitar directamente una ampliación de los plazos.
El grupo francés no ha iniciado aún negociaciones con los responsables de Bankinter para colaborar los dos grupos. La idea de la entidad gala, que entró en Bankinter el pasado 20 de noviembre, es invitar a directivos del sexto banco español a su junta de accionistas, que tendrá lugar el próximo 21 de mayo. Con este gesto pretende ganarse la confianza de Bankinter, entidad en la que es primer accionsita -el segundo es Jaime Botín con el 16,3%-, pero no se sienta en su consejo, ni se espera que lo haga en breve.
El grupo francés quiere invitar a los responsables de Bankinter a su junta de accionistas
La cúpula de Bankinter ha mostrado en reiteradas ocasiones su oposición a que entre en su máximo órgano de gobierno. Crédit Agricole le corre más prisa cubrir sus pérdidas. Por esta razón reconoció ayer que ultima una ampliación de capital por 5.900 millone de euros, como consecuencia del impacto negativo en el trimestre de 1.205 millones de euros de su filial de banca de inversión Calyon.
Estas pérdidas están ligadas a la crisis de las hipotecas de alto riesgo en Estados Unidos. Pese a estos número rojos, el grupo francés asegura en un comunicado que ha cerrado el trimestre con beneficios de 892 millones de euros, un 66% menos que en el mismo período del año anterio. Estas ganancias ya incluyen el impacto negativo por la depreciación de activos de Calyon.
El consejo de administración se reúne hoy para examinar las cuentas y pronunciarse sobre el proyecto de ampliación de capital, indicó el banco.
Según la edición del martes del diario Les Echos, la ampliación de capital se sumará al plan de emisión de acciones preferenciales por 3.600 millones de euros anunciada con anterioridad y ligada al tratamiento de los intereses de accionistas minoritarios.
Calyon ya tuvo unas pérdidas de 1.900 millones de euros en el cuarto trimestre del año pasado, unas grupo a relevar al director general de la filial, Marc Litzler, por el actual responsable de las actividades de servicios financieros especializados, Patrick Valroff.